Brochero y sus huellas en el interior de la provincia de Córdoba: La estación de trenes de Villa San Antonio (Obispo Trejo)

martes, 16 de agosto de 2016
image_pdfimage_print

0010136001

16/08/2016- En 1911, el Cura Brochero -quien residía en Santa Rosa de Río Primero- realizó las gestiones para que el ramal ferroviario del General Belgrano, entre La Puerta y Cañada de Luque, pasara por Villa San Antonio, hoy denominada Obispo Trejo. Radio María se comunicó con Salvador Moyano, quien nos cuenta detalles de las huellas de Brochero en esa zona.

El tren iba de La Puerta hasta Deán Funes, en un recorrido recto que evitaba por varios kilómetros el pueblo. “El Cura Gaucho monto su mula y se fue a Buenos Aires a hablar con los ministros. Logró que el recorrido del tren haga una gran curva para pasar por Villa San Antonio y el pueblo pueda tener el ferrocarril”, relató Moyano

El paraje de Villa San Antonio, como era conocido en ese entonces, contaba con 9 manzanas otorgadas por el estanciero José Manuel Pelayes, quien muere antes de concretar su sueño de fundar el pueble que llevaría este nombre. Con la llegada de los ferrocarriles, surge la necesidad de ponerle un nombre a la parada en que se producía el cruce. Se acuerda, entre los habitantes de Villa San Antonio y las autoridades del ferrocarril, nombrarlo tras otro sacerdote importante de la época, Trejo y Sanabria, y así se funda el pueblo de Obispo Trejo.

“Para mí, Brochero ha sido y va a seguir un gran ejemplo, encarnación de honestidad, buena postura, fe, sacrificio, humildad. Muy difícil de imitar pero tremendamente valioso e inconmensurable”, comentó emocionado Salvador Moyano, y agregó que la vida del Cura Gaucho sirve para demostrar a los jóvenes que “no todos han estado gastando el aire sino que han sabido usar el cerebro y el corazón por el bien de los demás”.