“Les pido que oren por los culpables de su pobreza para que se conviertan”

jueves, 7 de julio de 2016
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07/07/2016 – En el día de ayer el Papa Francisco se reunión en el Aula Pablo VI  con un grupo de 200 peregrinos pobres y enfermos acompañadas por el cardenal de Lyon, Philippe Barbarin, provenientes de Francia y pertenecen al Movimiento Cuarto Mundo, fundado por el sacerdote Joseph Wresinski en 1957.

El Papa pidió hoy a los pobres rezar por la conversión de los ricos y de los indiferentes ante el dolor y el sufrimiento de sus hermanos.

“Les pido que oren por los culpables de su pobreza para que se conviertan. Oren por muchos ricos que se visten de púrpura y hacen fiesta con grandes banquetes, sin darse cuenta de que a sus puertas hay tantos Lázaros ansiosos de lavarse y comer en sus mesas”, dijo el Papa.

En este contexto, Bergoglio aseguró que “los tesoros de la Iglesia son los pobres”. Por ello, les encomendó una misión: rezar por los llamados en el Evangelio “ricos”, “sabios” y los que ahora “ríen”. Rezar por los que les gusta “ser adulados y los hipócritas”.

Bienaventurados los pobres

En su mensaje, Bergoglio se basa en el discurso de la montaña sobre las bienaventuranzas en el Evangelio de Mateo 5, 6 y 7.

El Papa sostuvo que “Jesús fue muy severo y reprendió vigorosamente a las personas que no acogen el mensaje del Padre”. Y así, recordó: “bienaventurados los pobres, los que tienen hambre, los que lloran, los que son odiados y perseguidos”.

¡Ay de los ricos!

Igualmente, explicó que existen otras palabras de Jesús que dan miedo: “¡Ay de los ricos, de los sabios, de los que ahora ríen, de aquellos a los que les gusta ser adulados, de los hipócritas. Les doy la misión de orar por ellos para que el Señor cambie sus corazones”, insistió Francisco.

¡Ay de los indiferentes!

El Pontífice saludó, besó y abrazó a cada uno de los enfermos. Asimismo, instó a rezar por los indiferentes ante el sufrimiento de los demás: “Oren también por los sacerdotes, por los levitas que, viendo a su paso al hombre medio muerto, pasan derecho, mirando para otra parte, porque no tienen compasión”.

“A todas estas personas, pero también a otras que se relacionan mal con su pobreza y también con otros dolores, sonríanles de corazón y pídanle a Jesús que se conviertan. Y les aseguro que si ustedes hacen esto, habrá gran alegría en la Iglesia, en su corazón y también en la amada Francia”, aseguró el Obispo de Roma, que llamó a practicar las obras de misericordia en el Año Jubilar.

Fuente: Aleteia y Rome Reports