¿Para qué existe la Iglesia?

martes, 6 de junio de 2017
image_pdfimage_print

Comunidad1

06/06/2017 – Con la fiesta de Pentecostés nace la iglesia, la comunidad de apóstoles enviados a proclamar la buena noticia del evangelio por toda la tierra. Nosotros, cristianos del siglo XXI, heredamos ese mandato.

“El que los escucha a ustedes, me escucha a mí; el que los rechaza a ustedes, me rechaza a mí; y el que me rechaza, rechaza a aquel que me envió»”

Lucas 10,16

¿Qué significa “Iglesia”?

Es la comunidad de la Iglesia quien tiene la misión de anunciar la buena noticia que Jesús le enconmendó a los apóstoles. Iglesia viene del griego ekklesía = los convocados. Todos nosotros, quienes hemos sido bautizados y creemos en Dios, somos convocados por el Señor. Y juntos somos la Iglesia. Como dice san Pablo, Cristo es la Cabeza de la Iglesia. Nosotros somos su Cuerpo. [748­ – 757]

Cuando recibimos los sacramentos y escuchamos la Palabra de Dios, Cristo está en nosotros y nosotros estamos en Él: esto es la Iglesia. La estrecha comunión de vida de todos los bautizados con Cristo es descrita en la Sagrada Escritura con una gran riqueza de imágenes. A veces se habla del Pueblo de Dios, otras de la esposa de Cristo; unas veces se llama madre a la Iglesia, otras, la familia de Dios o se la compara con los invitados a una boda. Nunca es la Iglesia una mera institución, nunca sólo la “Iglesia oficial”, que uno podría rechazar. Nos irritan las faltas y los defectos que se dan en la Iglesia, pero no nos podemos distanciar nunca de ella, porque Dios ha optado por ella de forma irrevocable y no se aleja de ella a pesar de todos sus pecados. Es santa la Iglesia pero también se ha prostituído por algunos de sus miembros. Tiene un llamado constante a la purificación y a la santidad.

Cristo ha querido permanecer en ella para estar junto a nosotors, y es en el ámbito de la Iglesia donde el Señor manifiesta su presencia, aunque también más allá de ellas.

La Iglesia es la presencia de Dios entre nosotros los hombres. Por eso la amamos.

¿Para qué quiere Dios la Iglesia?

Dios quiere la Iglesia porque no nos quiere salvar individualmente, sino juntos. Quiere convertir a toda la humanidad en su pueblo. [758-781,802-804].

Nadie alcanza el cielo de forma individual. Quien sólo se preocupa de sí mismo y de la salvación de su alma, vive de forma asocial. Esto es imposible, tanto en el cielo como en la tierra. El mismo Dios no es asocial; no es un ser solitario, que se baste a sí mismo. El Dios trinitario es en sí “social”, una comunión, un eterno intercambio de amor. Según el modelo de Dios, el hombre está hecho para la relación, el intercambio, el compartir y el amor. Somos responsables unos de otros.

¿Cuál es la misión de la Iglesia?

La misión de la Iglesia es hacer brotar y crecer en todos los pueblos el reino de Dios, que ha comenzado ya con Jesús. [763-769,774-776,780]. La gran vocación de la Iglesia es la misión. Su razón de ser es la misión, anunciar a todos los pueblos el Reino de Dios que ya ha comenzado con Jesucristo. Lo hacemos abriendo las puertas de nuestras primeras comunidades, para que muchos se vayan unidiendo. 

Allí donde estuvo Jesús, el cielo tocó la tierra: Comenzaba el reino de Dios, un reino de paz y justicia. La Iglesia sirve a este reino de Dios. No es un fin en sí misma. Tiene que continuar lo que ha comenzado con Cristo. Debe actuar como lo haría Jesús. Continúa realizando los signos sagrados de Jesús (sacramentos). Transmite las palabras de Jesús. Por eso la Iglesia, con todas sus debilidades, es realmente un fragmento de cielo en la tierra.

¿Por qué la Iglesia es más que una institución?

La Iglesia es más que una institución porque es un (misterio) que es a la vez humano y divino. [770-773, 779] El amor verdadero no es ciego, sino que hace ver. Lo mismo ocurre cuando miramos a la Iglesia: vista desde fuera la Iglesia es únicamente una institución histórica, con logros históricos, pero también con errores e incluso crímenes: una Iglesia de pecadores. Pero esta mirada no es suficientemente profunda. Porque Cristo se ha comprometido de tal modo con nosotros pecadores que no abandona nunca a la Iglesia, incluso si le traicionáramos a diario. Esta unión inseparable de lo humano y lo divino, de pecado y de gracia, forma parte del misterio de la Iglesia. Por eso, vista con los ojos de la fe, la Iglesia es indestructiblemente santa. 0132

¿Qué es lo que hace único al Pueblo de Dios?

El fundador de este pueblo es Dios Padre. Su líder es Jesucristo. Su fuente de energía es el Espíritu Santo. La puerta de entrada al Pueblo de Dios es el bautismo. Su dignidad es la libertad de los hijos de Dios. Su ley es el amor. Si este pueblo permanece fiel a Dios y busca ante todo el reino de Dios, transforma el mundo. [781­786]

En medio de todos los pueblos de la tierra existe un pueblo que no es como ningún otro. No se somete a nadie, sólo a Dios. Debe ser como la sal, que da sabor; como la levadura, que lo penetra todo; como la luz, que aleja las oscuridades. Quien pertenece al Pueblo de Dios debe contar con entrar en contradicción abierta con las personas que niegan la existencia de Dios y desprecian sus mandamientos. Pero en la libertad de los hijos de Dios no hay que tener miedo a nada, ni siquiera a la muerte.

¿Qué quiere decir que “la Iglesia es el Cuerpo de Cristo”?

Especialmente mediante los sacramentos del Bautismo y la eucaristía se establece una unión indisoluble entre Jesucristo y los cristianos.

Esta unión es tan fuerte que nos junta a él y a nosotros como cabeza y miembros de un cuerpo humano y nos convierte en una unidad. [787­795] 0146, 175, 200, 208, 217

¿Qué quiere decir que “la Iglesia es la esposa de Cristo”?

Jesucristo ama a la Iglesia como un esposo ama a su esposa. Se vincula para siempre a ella y entrega su vida por ella. [796]

Quien ha estado enamorado una vez, intuye lo que es el amor. Jesús lo sabe y se denomina a sí mismo esposo, que corteja a su esposa con amor ardiente y que desea celebrar la fiesta del amor con ella. Su esposa somos nosotros, la Iglesia. Ya en el antiguo testamento se compara el amor de Dios por su pueblo con el amor entre esposo y esposa. Cuando Jesús nos corteja a cada uno de nosotros, ¡cuántas veces es un amante desgraciado, por así decir, enamorado de aquellos que no quieren saber nada de su amor y no le corresponden!

¿Qué quiere decir que la Iglesia es “templo del Espíritu Santo”?

La Iglesia es el lugar del mundo donde el Espíritu Santo está plenamente presente. [797-801,809]

El pueblo de Israel adoraba a Dios en el templo de Jerusalén. Este templo ya no existe. Su puesto lo ha ocupado la Iglesia, que no está sujeta a un lugar determinado. “Donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mt 18,20). Quien vivifica a la Iglesia es el Espíritu de Cristo: habita en la palabra de la Sagrada Escritura y está presente en los signos sagrados de los sacramentos. Habita en los corazones de los fieles y habla en sus oraciones. Conduce a la Iglesia y le otorga sus dones (carismas), tanto los sencillos como los extraordinarios.

Quien se confía al Espíritu Santo puede experimentar también hoy verdaderos milagros. 113-120,203-205,310-311

Padre Javier Soteras

Material elaborado en base al Catecismo de la Iglesia Católica