Jag Sameaj: comenzó la Pascua Judía

martes, 11 de abril de 2017
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11/04/2017-  Ayer comenzó para la comunidad judía el Pésaj, la Pascua judía,  que culmina el 18 de abril. En comunicación con Radio María el Rabino Marcelo Polakoff habló sobre esta festividad y algunas similitudes que cristianos y judíos compartimos.

Esta celebración es una fiesta que tiene tan sólo 3.300 años y es la fiesta más antigua. Además, “es una fiesta que celebraba Jesús también”.

“Es una oportunidad de reunirnos en familia y amigos, y resignificar el momento del Pesaj” contó el Rabino, que representa todo un acontecimiento ya que comienzan las discusiones sobre dónde se va a realizar el “seder”, que es la cena de Pascua. “Es parte de la idiosincrasia cultural”.

El Pésaj deviene de “pasaje” y significa el pasaje de la esclavitud a la libertad del pueblo judío en Egipto. “Donde nace el pueblo judío”, aclaró Polakoff y agregó “que en en la vida cristiana se va resignificar como un pasaje de la muerte a la vida”.

Con respecto a qué se realiza durante el “seder”, el Rabino dice que se va a leer el Hagadá, que “es relato que se escribió en varias generaciones, un libro de 3 milenios o 2 milenios; que está basado no solamente con lo que sucedió en Egipto y la salida sino que también está armado en  un formato de preguntas y respuestas, donde los más chicos son los que preguntan y los  grandes responden; y eso se mediatiza con  canciones y con alimentos simbólicos, como hierba amarga (representa la amarga vida de los esclavos en Egipto)” .

También cuenta con momentos significativos ya que “se abre la puerta de la casa y se dice “quién tenga hambre que venga y coma o quién  esté solo venga y comparta”. También se toman 4 copas de vino y se deja una vacía  para el profeta Elías, quien viene con el llamado de la redención.

Resignificar el Pésaj

El Rabino también habló sobre los pasos sociales que se pueden hacer para vivir más plenamente esta festividad. Recalcó que “no hay más que mirarnos en los espejos de nuestros ancestros, a nuestros abuelos y bisabuelos, que tenían valores y que hemos dejado de lado”. Asimismo resaltó la importancia de los valores como “del trabajo, del largo plazo, de la cultura del encuentro, de no sostener la identidad por lo que se tiene, sino por lo que es”. Y lo fundamental que es “el cara a cara, que cada vez se va perdiendo más, la idea de encontrarnos”.

Por ese motivo, hace unos cuantos años junto con un coro de personas de tercera edad,”re jovenes de espíritu”, hacen un saludo anual para  Pésaj y el Año nuevo, Rosh Hashaná. Se disfrazaron  y cantaron canciones de infancia, en un jardín de niños.