Matrimonio: salir de nuestra zona de confort

jueves, 10 de marzo de 2016
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9/8/2016 – Mónica Albanese y Darío Tamagnone, de Encuentro Matrimonial compartieron su experiencia de amor, y reflexionamos juntos sobre: ¿Cómo mantener el amor a lo largo del tiempo? ¿Cómo se supera la desilusión? ¿Qué ocurre cuando llegan momentos difíciles?

Moni comenzó diciendo que “Hay herramientas que nos sirven a todos, lo importante es el uso que le damos”, “las principales son el diálogo que incluye las palabras y los gestos y otras son las actitudes o comportamientos que tenemos”, y agregó que son herramientas que las conocemos pero que no las aplicamos”.

“Por ahí tenemos que dar ese pasito y salir de nuestro de confort” agregó Darío, su esposo que continuó diciendo que ante los conflictos “Se puede recobrar la armonía, aunque sea la crisis más profunda”. “Cuando entramos en esas etapas de crisis profunda, vemos todo negro, y creemos que la única solución es separarnos”.

 

Poner bajo la alfombra los problemas

Hay que estar alerta en las relaciones… la relación es como un semáforo: hay momentos que está verde, todo bien, el amarillo, precaución, y el rojo es pelea, pero no es mala la pelea, hay que saber pelear, comentó Mónica.

Aparee la señal de alerta “cuando no damos el primer paso, donde ninguno de los dos da el brazo a torcer, y a lo mejor pasa una hora, un día y Dios sabe cuánto. Esa es una señal de alerta, hay que pelear, “hay que discutir, tratar el tema, no esconder la basurita bajo la alfombra, y después hay que proponerse cambios”.

Aunque en el momento de ebullición no es aconsejable la pelea, dicen. Moni confiesa que en tiempos de crisis, ella reza: “Mi testimonio es rezar un padrenuestro y un avemaría”.

Darío admite que “uno cuando está calmo empieza a pensar” y agregó que “nosotros pasamos momentos en que hemos estado un buen tiempo sin hablarnos pero uno va aprendiendo que vamos perdiendo calidad en la relación y además es una situación muy incómoda. Es un ejercicio que uno va haciendo de a poquito”.

 

Todo el mundo nos decía que éramos una linda pareja, sin embargo…

Advertimos esta tibieza en la relación, que no es mala. Nosotros cuando entramos a hacer el fin de semana matrimonial no nos llevábamos mal para nada, éramos una linda pareja, todo el mundo nos decía “son una linda pareja”, pero en el fondo nos faltaba esa renovación, volver a la frescura, al romanticismo, saber qué es lo que pasaba dentro. Nosotros vamos cambiando por fuera y también por dentro, entonces hay que ir reconociéndose día a día, para mantener vigente esa frescura y lo vamos reconociendo a través de ese diálogo profundo.

 

¿Qué ocurre con la intimidad?

Hay que dar el paso para poder expresar lo que uno siente, que no sea una obligación, sino un momento de una unidad profunda, es un tema que también hay que ponerlo sobre la mesa y dialogarlo, poder expresar lo que se siente, cómo se siente, los gustos, las maneras, los modos.

“Dios nos une, nos sostiene, nos abraza y nos da la oportunidad todos los días de revisar nuestra relación y seguir creciendo en nuestro amor” terminaron diciendo.