El Papa pidió que “la Iglesia no sea una fábrica de obstáculos”

jueves, 8 de mayo de 2014
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08/05/2014 – El Papa Francisco, en su homilía de la misa cotidiana de este jueves en Santa Marta, recordó que “quien hace la evangelización es Dios”, oponiendo esta verdad al exceso de burocratización que puede obstaculizar el acercarse de las personas con Dios. El Santo Padre indicó que el modelo seguido por el Apóstol Felipe, presenta cualidades cristalinas de un cristiano, como “la docilidad al Espíritu Santo, el diálogo y la confianza en la gracia”.

El primer caso es cuando el Espíritu le indica a Felipe que interrumpa sus actividades y alcance la carroza en la que está viajando entre Jerusalén y Gaza, el ministro de la reina de Etiopía. “Felipe obedece, es dócil a la palabra del Señor. Seguramente ha dejado tantas cosas que debía hacer, porque los apóstoles en aquellos tiempos estaban muy ocupados con la evangelización. Deja todo y va. Y esto nos hace ver que sin esta docilidad a la voz de Dios nadie puede evangelizar, nadie puede anunciar a Jesucristo, o como máximo anunciará a sí mismo. Es Dios que llama, es Dios que a Felipe lo pone en camino. Y Felipe va, es dócil”, dijo el Papa.

El encuentro con el ministro etíope es para Felipe una ocasión de anuncio del evangelio. Pero este anuncio -explicó Francisco- no es una enseñanza que llega desde lo alto, una imposición. Se trata de un diálogo que el apóstol tiene el escrúpulo de iniciar, respetando la sensibilidad espiritual de su interlocutor que esta legendo, sin lograr entender una estrofa del profeta Isaías.

“No se puede evangelizar sin dialogar, no se puede. Porque uno debe partir justamente desde donde está la persona que debe ser evangelizada”.

El Papa recordó que alguien podría decir: 'Pero padre, se pierde tanto tiempo, porque cada uno tiene su historia, viene con esto, con sus ideas…' Y Francisco añade: “Más tiempo ha perdido Dios en la creación del mundo y lo ha hecho bien”.

Y nos pide “perder el tiempo con la otra persona, porque aquella persona es la que Dios quiere que uno evangelice, a la cual uno le dé la noticia de que Jesús es lo más importante. Pero como esa persona es ahora, no como deberá serlo”.

Las palabras de Felipe suscitan en el ministro etíope el deseo de ser bautizado y en el primer curso de agua así sucede. Felipe bautiza al etíope, “lo pone en las manos de Dios y de su gracia”. Y el Papa añade: el ministro además pasará a transmitir la fe y “esto quizás nos ayudará a entender mejor que quien hace la evangelización es Dios”.

Y el Santo Padre invitó por lo tanto a meditar sobre estos tres momentos de la evangelización: la docilidad para evangelizar y hacer lo que Dios nos manda; el diálogo con las personas, aunque es neceario partir desde donde ellas están; y tercero, confiar en la gracia: es más importante la gracia que toda la burocracia.

E invitó a recordar que “muchas veces nosotros en la Iglesia somos una empresa para fabricar impedimentos de manera que la gente no pueda llegar a la gracia. Que el Señor nos haga entender esto”.

Esta mañana, el Papa Francisco recibió en audiencia en el Palacio Apostólico, a Su Santidad Karekin II, Patriarca Supremo de todos los católicos armenios. El Papa consideró que es “una gracia especial poder encontrarnos en esta casa, al lado de la tumba del apóstol Pedro y compartir un momento de fraternidad y de oración”. El Santo Padre recordó que entre las ocasiones de encuentro entre los ortodoxos armenios y Roma figura "la Conmemoración de los Testimonios de la Fe del siglo XX, que se realizó durante el Jubileo del 2000, a la cual su santidad Karekin II participó", y aunque no citó explícitamente el genocidio armenio por los turcos, precisó que “el número de los discípulos que esparcieron su sangre por Cristo, en los trágicos eventos del siglo pasado, es seguramente superior a la de los mártires de los primeros siglos”, en el cual “los hijos de la nación armenia tienen un lugar de honor”.

El genocidio armenio se debió a la deportación forzosa y exterminio de aproximadamente entre 1,5 y 2 millones de personas, por el gobierno de los Jóvenes Turcos en el Imperio otomano, desde 1915 hasta 1923. Las muertes fueron provocadas debido a masacres y marchas forzadas extremas en las deportaciones. Turquía no niega el exterminio pero señala se debió a luchas interétnicas, enfermedades y desnutrición durante la Primera Guerra Mundial y no a un plan de limpieza étnica.

El Papa señaló que así "como en la Iglesia antigua, la sangre de los mártires se volvió semilla de nuevos cristianos" precisó que "el ecumenismo del sufrimiento, el ecumenismo del martirio y el ecumenismo de la sangre, es una llamada potente a caminar por la vía de la reconciliación entre las Iglesias, con decisión y confiado abandono en la acción del Espíritu Santo".

Por otra parte, hoy se conoció que el Papa irá a Sri Lanka en enero próximo. Francisco es un Pontífice que tiene una atención particular por Asia. Al recibir a los obispos de Sri Lanka, que se encuentran en la Santa Sede debido a la visita "ad Limina apostolorum", el Santo Padre confirmó su visita al país en enero de 2015, con un viaje que podría extenderse hacia Filipinas. Se trata de una etapa asiática más, después del viaje a la Tierra Santa (24 al 26 de mayo) y Corea (14 al18 de agosto). Los obispos de Sri Lanka indicaron que el "viaje ya está fijado y definido", y explicaron que la presencia del Papa en su país pretende favorecer la reconciliación y una auténtica paz social en la isla.


Zenit / Vatican Insider / Rome Reports / Centro Televisivo Vaticano