“Acoger la vida del otro en el día a día”

10/02/2021 – En el ciclo, “Misionando con María” dialogamos con Milagros Parola, quien estuvo un año misionando en Ecuador, enviada desde el Movimiento Puntos Corazón.

Milagros sintió el llamado de misionar mientras era catequista en la parroquia de su ciudad. Recibió un folleto por parte de un sacerdote y a partir de allí comenzó un camino de preparación. Tiempo después, ya en el Movimiento, la joven fue enviada a misionar durante todo el año 2018 a Ecuador.

La vida comunitaria en Ecuador

Milagros contó que durante la formación previa a la misión se sintió muy acogida por todos los que participaban en Puntos Corazón: “Uno tiene muchas intrigas, dudas y miedos, son imaginaciones propias del paso que vamos a dar”, confesó.

“Cuando llegamos al destino, no era como pensaba. Me di cuenta que salí pensando que iba a poder amar a todos, pero a veces me costaba. Fue el paso de dejar mis límites a Dios. Eso permitió vivir la misión, reconociendo virtudes y miserias”. Además, Milagros resaltó la confianza que hay que poner en Dios: “Es importante dejar actuar a Dios y confiarle todo. Un sacerdote en la misión me compartió una frase que me marcó: ‘Señor, yo no puedo, Tú puedes, Tú me lo prometiste’”.

En referencia a la vida comunitaria, Milagros dijo que convivió con hermanos de otros países y compartió otras culturas en la convivencia diaria con ellos. “Somos como una familia, sobre todo los que vamos conviviendo, nos convertimos en hermanos. Es una experiencia hermosa sentir que desde distintos países estamos todos llamados a servir a Dios”, reflexionó.

Con respecto a las enseñanzas que dejó esta misión, Milagros resaltó: “En nuestra vida cotidiana, tenemos diferentes comunidades: familia, amigos, compañeros de facultad, etc. pero hay que entender el proceso del otro y respetarlo. Eso es lo que se hace en la misión, acogemos la vida del otro en el día a día”.

Por último, la joven resaltó que lo fundamental para vivir en comunidad es amar al otro tal como se me presenta, “con sus virtudes y sus pecados”. “Dios me presenta esas personas porque así Él las ama, y ellos me aman tal como soy yo también. Es vivir la compasión entre todos”, finalizó Milagros.

Te invitamos a escuchar el programa completo en el audio al inicio de esta nota y a compartirlo en tus redes sociales

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