¿Cuál es la actitud cristiana frente al fin de los tiempos?

lunes, 22 de junio de 2020
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22/06/2020 – Esta vez, el padre Alejandro Nicola comenzó diciendo: “Nos ubicamos en el siglo tercero donde Cipriano vivía en Cartago es la capital que está en el norte de África, en esas épocas el imperio Romano lleva a cabo una persecución contra los Cristianos. La historia de la Iglesia nos dice que hubo tres grandes períodos de persecuciones donde al principio eran persecuciones de tipo individual luego persecuciones en masa y por último se quería borrar a los Cristianos por completo. Nos situamos en la segunda etapa (donde se realizaban persecuciones en masa) como él era Obispo de este lugar le tocó alentar fuertemente a las comunidades sobre todo a los que tenían miedo de ser asesinados por lo que apostataron a su fe Cristiana, luego pedían ser reincorporados a la comunidad a ellos se les llamaba los “lapsi” (palabra latina que significa los que han caído) algunos no estaban contentos de incorporarlos nuevamente ya que no se habían animado a vivir la fe cristiana hasta el extremo. Cipriano es alguien que está atento a las problemáticas  y necesidades de la gente de su época”.

El padre Nicola leypi un texto de Cipriano de  Cartago (n° 2 de Mortalitate): “En efecto queridísimos hermanos  el que sirve en la milicia de Dios el que ya está colocado en el campamento divino y tiene puesta sus esperanzas en el cielo debe conocerse a sí mismo para que no surja en nosotros ningún temor ni turbación ante las borrascas del mundo porque el Señor ha predicho y enseñado que sucederían todas estas cosas exportando instruyendo preparando y fortificando al pueblo de su iglesia para soportar cada uno de los mal futuros”. 

El ya anunció que surgirían por muchos lugares guerras, hambre, terremotos, pestes y para que no nos tomara esto de sorpresa y no nos invadiera el temor a las acometidas de estos fenómenos extraordinarios nos advirtió de antemano que los últimos tiempos sucederían calamidades todavía más numerosas.

 He aquí que sucede lo que había sido predicho y cuando suceda lo que había sido anunciado se cumplirán también las promesas hechas por el Señor que dice: cuando venga acaece todo esto sepan que está cerca el Reino de Dios, mis queridos hermanos comienza a estar cercano el premio de la vida,el gozo de salvación eterna la alegría sin fin y la posesión del paraíso ya perdida una vez se avecina al perecer este mundo. Ya lo celestial sucede a lo terreno, lo grande a lo pequeño lo eterno a lo caduco ¿que ansiedad o inquietud hay que tener ahora? ¿quien va a estar temeroso y triste entre tantos bienes si no solo vine aquel que carece de esperanza y fe? solo puede puede temer a la muerte quien rehúsa ir a Cristo y no querrá ir a Cristo quien no confíe que comenzará a reinar con él.

La pequeña reflexion que nos queda luego de leer Mortalitate se fundamenta en el hombre, que tiene una condición mortal por eso hace referencia de el que sirve en la milicia de Dios y tiene puestas sus esperanzas en el cielo debe conocerse a sí mismo.

Fijense que usa 4 verbos Jesús lo enseñó, exhorto instruyendo preparando y fortificando al pueblo de su Iglesia para soportar cada uno de los males futuros.

Luego cita a Lucas 21.31 cuando ven que acontece todo esto sepan que está cerca el Reino de los cielos .

El señor advierte instruye enseña y prepara.Una admonición que suscita para que el que está oyendo abra el corazón y la mente para poder estar preparado en una batalla.

Hay que estar preparado para el reino de Dios.

Hacer referencia a lo apocalíptico da miedo pero hay que verlo de otro punto de vista, cada catástrofe o enfermedad fue interpretada a lo largo de estos 2000 años de historia como un posible signo. Probablemente sea un signo, el tiempo en la mente y corazón de Dios tienen otra categoría porque El es eterno, mil años en tu presencia es como un ayer que pasó.(Salmo: 89)

Es importante leer lo que dice la palabra de Dios, tener una lectura espiritual, tener en cuenta que desde que fue creado el mundo ha comenzado su fin.

A Continuación  se presenta el texto n° 25 de Mortalitate.

Ahora que el mundo va a perecer se encuentra envuelto en tanta ruina y fuerzas destructoras de tal modo que sabemos que se están produciendo grandes males y amenazas mayores, consideremos que es una gran ganancia salir cuanto antes de este mundo.

 Si se bambolean las paredes de tu habitación por estar muy viejas si tiembla el techo, si tú casa ya gastada y arruinada por los años amenaza una ruina próxima, a caso ¿no te alejaras de ella a toda prisa ? Si navegando te vieres ante un sufragio inminente por una tempestad furiosa en medio del viento y de las olas a acaso ¿no buscarlas a toda prisa un puerto? pues vean que el mundo se pasa.

 Debemos pensar y reflexionar qué hemos renunciado al mundo y vivimos aquí durante la vida como huéspedes y viajeros, acojamos con alegría el día que coloca cada uno en su domicilio que nos restituye a nuestro reino y paraíso una vez que escapamos de este mundo y nos vemos libre de los lazos, quien estando lejos no se apresura a volver a su patria,quien a punto de embarcarse a ver a los suyos no desea viento favorable para lograr abrazarlos cuánto antes Nosotros tenemos por patria al paraíso por Padre a los patriarcas por qué pues nos apresuramos y corremos para poder ver nuestra patria y saludar a nuestros padres, nos esperan allí muchos de nuestros seres queridos nos echa de menos la numerosa turba de padres hermanos hijos seguros de su salvación pero preocupados todavía de la nuestra.

 Que alegría tan grande para ellos y nosotros llegar ante ellos y abrazarlos qué placer disfrutar allí del reino del cielo sin temor de morir y con la vida eterna la felicidad más grande y perpetua.

Padre Nicola hace la siguiente reflexión: Cipriano es consciente de que hay males y ruinas, partimos de la convicción de que el mundo va a tener su momento final .

Tendremos miedo a morir o a dejar este mundo, tanto el que es huésped como viajero está en este mundo en situación de provisoriedad, es provisoria su estadía en una casa que no es completamente suya es peregrino caminante a un lugar, la patria eterna el paraíso la vida eterna.¿Vivimos realmente como viajeros con esta provisoriedad o nos hemos adueñado?

Para finalizar el encuentro del Miércoles 17 de junio el Padre Alejandro se despidió citando la frase con la que Cipriano termina su obra:

Que alegría tan grande para ellos y ahora nosotros llegar y abrazarlos qué placer disfrutar allí del reino del cielo sin temor de morir y con la vida eterna la felicidad más grande y perpetua ello el coro glorioso de los apóstoles allí el gozoso grupo de los profetas la multitud innumerable fe los mártires que han Sido coronados por los méritos de su lucha y sufrimiento allí las santas vírgenes que triunfaron .

Una imagen del cielo. Corramos queridísimos hermanos con anhelo a ellos roguemos poder encontrar enseguida junto con ellos y de llegar pronto a Cristo.