De la madurez de los padres, depende la madurez de los hijos

martes, 18 de junio de 2019

14/06/19- La Lic. Ángela Sannuti nos acompaña viernes por medio en el programa “Hoy puede ser” para hablar de temáticas que nos permiten adentrarnos en nuestro mundo interior, con sencillez y profundidad.

En esta oportunidad la especialista abordó un tema que constituye el corazón de la educación: “La madurez de ser padres, la madurez de ser hijos”.

¿Qué es la educación?

“La educación consiste en ayudar a que el niño sea él mismo plenamente, que exprese más y más su potencial hecho de cualidades. Acompañar y alentar a que el niño desarrolle la conciencia de sí mismo. No se trata de ponerle piedras en el camino para que aprenda a saltar y moverse desde el miedo; se trata de estimularlo, inspirarle confianza, para que él mismo sea consciente de que está hecho de dones y que es su tarea en comenzar a desplegarlos; ya que en el desarrollo de esos dones se encuentra el gozo de vivir.”

Modelo y esencia

“El único modo de educar bien es que el que educa, viva y funcione bien. Si el adulto no vive y funciona bien, es porque hay aspectos no desarrollados en él. El problema es que a los niños no se los educa, se los formatea. En esto radica la gran crisis de la educación en el hogar y en la escuela. El modelo pasa a ser más importante que la esencia. Esto explica porque vivimos en una gran dependencia emocional, toda la vida queremos adecuarla al modelo.”

¿Cuáles son la necesidades básicas de un niño?

Hay tres necesidades que son fundamentales: la primera es la de ser amado, querido , aceptado, ser deseado. “Cuando un niño siente que no lo aman, piensa que es porque no merece ser amado. Ésto a lo largo de la vida se manifiesta en las diversas relaciones donde aparece esta sombra “no merezco ser amado”.”

La segunda necesidad es que el niño quiere que lo protejan. “La protección es que el niño sienta que no está solo, que hay alguien que lo acompaña. La raíz de muchos miedos está aquí, hay muchos niños que se sienten muy solos.”

La tercera necesidad de un niño es es que lo vean. “El niño necesita ser visto. Pero quiere ser visto como tal como es, porque cada uno de nosotros es distinto; si no es visto en su esencia comienza a sentirse vacío.”

No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.