“El corazón de Dios enciende su ternura mas profunda: la Misericordia”, padre Albóniga

miércoles, 11 de septiembre de 2019
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11/09/19 – En este encuentro con el padre Luis Albóniga, dentro del ciclo “Misericordiosos como el Padre, hablamos sobre “La ternura de nuestro Dios”.

“El hombre no puede vivir sin amor, su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, por esto precisamente Cristo Redentor, revela plenamente el hombre al mismo hombre”, dijo el padre Luis citando a Juan Pablo II, en su Carta Encíclica Redemtor hominis.

“Cuando nos encontramos con Cristo nos encontramos con el Amor, de ese modo Cristo nos rescata y ese amor primero es el encuentro con la misericordia de Dios. Por eso es muy importante tener buena memoria y recordar esas primeras experiencias de la misericordia de Dios, para renovar la conciencia de cuanto nos ama. Hacer memoria renueva la apertura de a hacer experiencia de ese amor también hoy.

Memoria como pueblo de la misericordia de Dios

El sacerdote basó su reflexión en el texto del libro del profeta Oseas, capítulo 11, versículos del 1 al 9:  “El profeta Oseas es un hombre de Dios que se ha ido haciendo experto en del amor, no por sus éxitos amorosos, sino por sus desventuras y sus fracasos. Dios valiéndose en las experiencias de Oseas, que es una experiencia que todos conocemos a través de alguna desilusión, habla del amor esponsal de manera maravillosa y conmovedora. Muchas veces la experiencia del amor de Dios involucra personas concretas, a través de quienes nos llegó la misericordia del Señor”

“Suele pasar en la historia afectiva que cuando alguien nos ama mucho empezamos a dar por descontado que tiene que amarnos, así como la historia de Israel con Dios” dijo el padre Albóniga

La primera parte de este oráculo es la memoria del amor de Dios que es como un Padre y también la idolatría y el rechazo de su Pueblo.

La segunda parte habla de la consecuencia, aunque Dios los siga atrayendo con lazos de amor, la apostasía, el abandono y rechazo de Dios va a llevar al pueblo a la ruina. No porque sea un castigo, sino porque cuando nos alejamos del centro que es Dios empieza a desordenarse nuestro corazón, nuestros vínculos y hasta puede pasar que el amor en vez de ser fuerza de ternura, se convierta en dominio.

La tercera parte es lo que hace Dios ante esta situación de idolatría de su pueblo. El corazón de Dios da como un vuelco sobre si mismo y en vez de descargarse como ira, enciende su ternura mas profunda: la Misericordia.

El padre Luis señaló que “hacemos memoria de la misericordia de Dios que es nuestro origen, para también entender que la misericordia de Dios es nuestro destino.Dios es quien nutre nuestro corazón misericordioso para que podamos amar a los demás”

Él es como un padre, pero también como una madre. Es importante saber que Dios trasciende estas imágenes, porque al mismo tiempo que es como un padre o una madre, es mucho mas que eso.

La Misericordia, rasgo fundamental de la santidad

“Cuando hablamos de santos, estamos hablando de la misericordia de Dios, el rasgo fundamental de la santidad es la misericordia. Parecernos a Dios en misericordia. Estamos llamados a ser santos mediante nuestro obrar en amor y misericordia”, reflexionó el padre Luis

Cuando tenemos una situación de dificultad se abre esa grieta por donde puede entrar con mas fuerza la ternura de Dios, como en nuestra historia del pueblo de Israel, cuando prácticamente el vinculo con Dios se estaba perdiendo y Oseas cantó al Pueblo de Dios para revelar su misericordia.

Escuchá la reflexión completa del padre Luis Albóniga al inicio de esta nota

Estamos en el ciclo “Misericordiosos como el Padre” junto al padre Luis Albóniga, rector de la Escuela Universitaria de…

Posted by Radio María Argentina on Tuesday, September 10, 2019