“En el “estar” reside la fortaleza de María”, dijo el padre Miguel Marengo

miércoles, 5 de junio de 2019
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05/06/2019 – El padre Miguel José Marengo, quien se dedica al acompañamiento de personas privadas de su libertad y sus familias, desde Bolivia reflexionó sobre la virtud de la fortaleza que nos deja María, diciendo que “Algo que yo admiro mucho y siempre me ha motivado desde lo que veo desde la pastoral carcelaria, es la fortaleza de la mujer, la mamá, la hermana o la esposa de los privados de la libertad”.

“El hacer horas de viaje, el hacer cola, el tener que esperar, el aceptar la requisa, y de ahí salir adelante, ahí se muestra hasta donde llega el extremo del amor”.

“Un día le pregunto a una mujer  que venía del norte de Córdoba a Ezeiza: <¿Cómo hace para aguantar tanto, tanto viaje?>. “Y esto está relacionado con la confianza de que un día el hijo va a salir -completó- cree en esa promesa y se une a esto de estar, de perseverar”. “Yo allí he visto muchos signos de fortaleza”. “La presencia de María es muy importante en la cárcel”.

Y en este sentido, el padre Miguel relacionó la fortaleza de estas mujeres con la fortaleza de la Virgen María, “A mi me gusta unir la fortaleza a la fe, y en las palabras de Isabel cuando María la visita: <Dichosa tú que has creído>, refleja que aquí está la fortaleza de María, en haber creído en las promesas del Señor”, indicó el sacerdote.

“María abre puertas, a mi gracias a Dios María me ha abierto muchas puertas”.

En cuanto a la virtud de la fortaleza vivida en el ámbito personal, el padre Miguel testimonió que “La fortaleza en mí la acreciento al ver a tantos hermanos y hermanas que uno acompaña”.  Y completó que “Uno se alimenta de esta experiencia profunda en el Señor, de la oración, de la lectura de la Palabra, y del testimonio de las personas con las cuales uno camina, esto nos levanta, nos da fuerza para seguir adelante”.

Finalmente, el sacerdote indicó que “Las relaciones humanas, el estar en contacto con todos y estar un poco en la base, abajo, caminando en las periferias como dice el Papa, es lo que te ayuda a seguir adelante, salir, enfrentar la vida, y empezar y continuar”, concluyó el padre Miguel José Marengo.