“En mi profesión tengo presiones, pero con la fe siento paz”, afirmó el entrenador Mario Sciacqua

lunes, 19 de julio de 2021
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19/07/2021 – Mario Sciacqua es el entrenador de Sarmiento de Junín (Buenos Aires). Fue futbolista profesional y hoy es uno de los técnicos de la primera división del fútbol argentino. “Trato de vivir los valores que recibí desde pequeño. Yo nací y viví en Berabevú, en el sur de la provincia de Santa Fe, hasta mis 15 años. La forma en que vivo el fútbol tiene que ver con la formación que me inculcaron de niño. Armonía, solidaridad y hermandad es lo que intento transmitir. En el plantel de Sarmiento tengo 37 jugadores, la mayoría de ellos con poco más de 20 años. Me gusta hacer actividades solidarias con ellos, les pido que sean educados al hablar”, indicó Sciacqua.

En 1985, con 15 años, me fui a vivir solo a la ciudad de Rosario porque me integré a las inferiores de Newell’s Old Boys. Lo tuve a Marcelo Bielsa en toda mi etapa formativa como futbolista, eso me marcó mucho. Finalmente pude debutar en Colón de Santa Fe. En ese tiempo, mi familia se mudó primero a Rosario y después volvieron a la ciudad de Santa Fe, de donde son mis padres. Mi mamá me acompañó mucho en mi etapa de desarraigo en Rosario. Y mi papá aún hoy me sigue acompañando siempre que puede”, declaró Mario.

“En mi familia somos muy unidos con mis hermanas. Yo tuve formación católica, pero el quiebre lo hice cuando comencé la catequesis familiar en el 2011 con mi hijo mayor en Santa Fe. Como será que terminé recibiendo el sacramento de la confirmación con monseñor José María Arancedo. Imaginate cómo viví eso”, sostuvo. “Dejé de jugar al fútbol profesionalmente a los 27 años, ahí conocí a Florencia, mi esposa. Siempre ando viajando y ella es el sostén de la familia. Tengo 3 hijos. No soy un padre ausente, todo lo contrario. Pero eso es posible por lo que hacemos con Florencia, ella siempre está”, matizó Sciacqua.

“Cuando dejé el fútbol y comencé con la dirección técnica en Santa Fe, tenía una moto Honda Dax y me iba a los barrios populares y a los comedores, eso me encanta hacer”, dijo. “Desde que comencé el proceso de crecimiento en la fe con la catequesis familiar que hicimos llevo siempre una imagen de la Virgen de Guadalupe conmigo”, agregó. “Cuando dirigí a Gimnasia de Jujuy, en ese paraíso de la fe que es esa ciudad del NOA, conocí al padre Barrera de la Virgen de Río Blanco y Paypaya y al padre Pepe del santuario de San Expedito”, sostuvo Siacqua.

El año pasado, en el inicio de la cuarentena perdí mi trabajo en Godoy Cruz, el Tomba mendocino, y comencé a sentir tristeza. Así que un día me fui a rezar a la Virgen de Guadalupe a su casa en Santa Fe y fue así que comencé a recibir a los peregrinos, les ponía alcohol en gel a los que llegaban, esa fue mi ofrenda”, aseveró Mario. “En Patronato me hice muy amigo del padre Alejandro Paterson y del padre Diego Rauch de la comunidad parroquial Santa Teresita. En Bahía Blanca me hice amigo del padre Java, un sacerdote muy joven porque me fui a vivir al lado de la Catedral local, yo pedí eso”, indicó el ex futbolista y entrenador.

Donde voy busco un sacerdote para que organice una celebración junto al plantel antes de cada partido, el 70 por ciento más o menos participa. Cuando era técnico de Olimpo tuve la oportunidad de participar en Córdoba de algo similar cuando visitamos a Talleres de Córdoba. Con la fe siento paz, vivo tranquilo. En mi profesión recibo muchas presiones, como anoche que perdimos 3 a 0 con Sarmiento, pero estoy en paz. Anoche, después del partido me puse a rezar”, resumió.

“Yo pongo todo en manos del Señor, tengo paciencia, estoy creciendo en la fe. Te cuento algo, el gran Alejandro Sabella en la charla técnica antes le hablaba a sus jugadores del rival, pero iniciaba contándoles desde la formación histórica que tuvo su pueblo, les daba un contexto histórico y cultural”, agregó. “Hace unos meses llevé al plantel de Sarmiento a visitar la Basílica de Luján, les di la opción a los pibes de bajar a ver a la Virgen. Bajaron todos, algunos hasta lagrimearon y yo también”, cerró el director técnico de Sarmiento de Junín.