La cuarentena de los más chicos

martes, 28 de abril de 2020
image_pdfimage_print

 

28/04/2020 – La mayoría de los niños en Argentina permanecen en sus casas, sin salir, desde hace 44 días, prácticamente desde el lunes 16 de marzo, cuando se suspendieron las clases presenciales, una de las primeras medidas que tomó el Gobierno nacional tendientes a hacer frente al avance del coronavirus en el país.

Los niños no forman parte de los grupos de riesgo, sin embargo, son los únicos que hasta hoy no tienen un permiso para salir de sus casas, como sí lo tienen los adultos que a veces salen de sus casas para comprar alimentos o para hacer un trámite esencial. Hace poco más de una semana, por ejemplo, se permitió a las personas con discapacidad intelectual o con alguna condición del espectro autista realizar salidas excepcionales. Pero a los niños no.

¿Qué sienten los chicos en esta cuarentena, en este encierro y cómo lo expresan? ¿Qué pasa por su psicología? . La Licenciada Araceli Montoya, psicóloga e integrante del Servicio de Crianzas Saludables que depende del área de Extensión de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba dijo a Radio María Argentina: “Los primeros días de la cuarentena era una situación nueva, inédita, inesperada. Puede que hayan sentido enojo, cierta frustración por no poder salir, por no poder hacer sus cosas cotidianas pero, de alguna manera la situación podía sobrellevarse los primeros días. Ahora, ya llevamos muchos días de esto y puede generar distintas alteraciones en el estado de animo de los chicos porque ya son muchos días y, sobre todo con los mas chiquitos se les complica a los padres explicarles que la restricción continúa”.

Uno de los derechos universales de los niños y niñas es poder jugar, recrearse, moverse, divertirse; acciones que se han visto obstaculizadas por la situación de encierro, de cuarentena. En este marco, hay numerosos testimonio que nos ayudan a pensar en cómo podemos jugar con los niños, permitirles la recreación, compartir alguna actividad que les permita gastar energías contenidas, en casa, en cuarentena.

Uno de estos testimonios es el de Ana Tartabini, docente de nivel inicial, con larga experiencia en salas de jardines de infantes, en el trabajo con los niños, y desde hace unos años dedicada a la formación docente. Al respecto, Tartabini subrayó que, “en estos tiempos de pandemia, nos interpelan de algún modo a poner en juego otra cosa más que los dedos y el cerebro para jugar sino, poner todo el cuerpo en movimiento recuperando una idea ancestral ligada al juego que es poner el cuerpo en juego para jugar. Esto es todo un desafío para los chicos y para los adultos”.