“La práctica colectiva de la música desarrolla habilidades de respeto, compromiso y solidaridad”, María José Patiño

viernes, 18 de enero de 2019
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18/01/2019 – En nuestro ciclo “La música y el canto, herramientas de promoción” nos acompañan María José Patiño, coordinadora de la Orquesta Escuela Mediterránea Infantil y Juvenil de Córdoba, María Luz Esteban, coordinadora pedagógica del núcleo de Unquillo y profesora de Violoncello  y Maria Teresa, profesora de música y Directora de Coros.

María José, hablando acerca del impacto de la educación musical en la vida de los niños y sus familias, señaló que si bien no se tiene realizada aún una medición por tratarse la Orquesta Escuela de una entidad relativamente nueva, sí reciben testimonios y experiencias de cómo la formación en la música repercute en el niño y en su entorno:

“Son muchas las aristas a tener cuenta con el proyecto de la orquesta, se busca formar un ciudadano responsable, solidario, respetuoso, dedicado, disciplinado y que la enseñanza y la practica colectiva de la música impacte en todas su vida: en su familia, en la sociedad y en el grupo en el que vive y en la faz individual, en su performance o desempeño escolar para tener una vida exitosa y feliz, en sus competencias sociales, en su interacción con otros niños y pares, desarrollando habilidades de respeto, de compromiso y solidaridad.”

Por su parte, Luz Esteban, en torno al impacto en el rendimiento escolar, manifestó que la formación musical va pasando naturalmente al ámbito escolar:

 “Sin darse cuenta el niño aprende a sentarse, a quedarse quieto, a concentrarse… son habilidades cognitivas que se usan en todo, no sólo para el instrumento. Constatamos que muchos de los abanderados, en las escuelas donde estamos, son chicos que van a la Orquesta”, señaló.

Finalmente, la profesora María Teresa, describió a la música como un lenguaje que se habla,  se escribe y se comprende: “Es una de las cosas más enriquecedoras que la Orquesta como sistema ofrece para la realidad social”.

“A través de la práctica con la Orquesta han podido incorporar de manera más cabal el uso de la música como un lenguaje. Chicos que tenían dificultades en la lecto-escritura de la lengua, pueden escribir y leer música sin dificultad, lo que ha significado una revalorización de sus docentes”, profundizó.

“Hay una inteligencia musical que pueden desarrollar en esta práctica de la orquesta y que hace que las otras inteligencias se potencien. Si podemos trabajar desde esta inteligencia musical, las otras -lingüistica, matemática, que tienen que ven con el análisis- empezarán a encontrar sus vías de desarrollo desde otro lugar”, puntualizó.