¿Sólo lloramos con lágrimas?

martes, 11 de mayo de 2021
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10/05/21- “A las lágrimas hay que interpretarlas, encausarlas y ponerles un límite”, dijo el Padre Mateo, sacerdote camilo y Máster en Pastoral de Salud. “Las lágrimas no son fin de si mismo, sino que el fin es la sanación”.

La pena debe salir

“Si la pena se queda adentro se pudre, nos pudre y pudre a los demás. Si la pena no sale y no se trabaja con un buen duelo, nos produce una infección generalizada en la seis dimensiones de la persona. ¿Cómo sale la infección del sufrimiento?: a través de las lágrimas; porque en una primera instancia nos quedamos sin palabras. Después de que pasó la primera instancia del motivo de mi duelo, debo poderle un límite a mis lágrimas. Debemos cuantificar y cualificar las lágrimas. Las lágrimas tienen espacio y tiempo.”

Hay que invitar a las lágrimas

“Cuando uno llora, se desestresa. Esto sucede porque las lágrimas tienen una hormona llamada prolactina. Además, las lágrimas bajan la presión sanguínea, relajan los músculos con efecto sedante, mejoran el estado anímico y favorecen la comunicación. La lágrimas activan los recursos interiores que tenemos, facilitan la claridad mental y se hacen oración.”

Diversos tipo de lágrimas

“No sólo lloramos por dolor; hay diversos tipos de lágrimas. Están las lagrimas de agradecimiento, las lágrimas de alegría, las lágrimas de compunsión, las lágrimas de esperanza, las lágrimas espirituales. Tengamos presente entonces que las lágrimas son normales, naturales y necesarias.”

No sólo lloramos con lágrimas

“Hay personas que dicen que nunca han podido llorar; pero…¿sólo lloramos con las lágrimas?. No hay que confundir llorar con lágrimas; las lágrimas son un canal. Además de llorar con las lágrimas, tenemos que llorar con las palabras. En el texto bíblico, los discípulos de Emaús caminaban acongojados, cuando se les presenta Jesús y comienzan a desahogarse con palabras. Lloramos por fuera pero también por dentro. No hay que preocuparse si no podemos llorar con lágrimas, hay que preocuparse si no podemos llorar con palabras; porque corremos el peligro de que la pena se pudra dentro.”

No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.