Vayamos a Belén, una invitación del Padre Ángel Rossi

viernes, 14 de diciembre de 2018
image_pdfimage_print

14/12/2018 – El Padre Ángel Rossi comenzó su reflexión recordando lo que nos decía el papa Francisco en la Evangelii Gaudium “Yo soy una misión en esta tierra y para eso estoy en este mundo”. “Cada uno de nosotros es una misión, es un mensaje para los demás. No sólo tenemos una misión -agregó- somos una misión, porque la misión nos da identidad”, expresó.

¿Qué buscamos en el Pesebre?

Ante la pregunta: ¿Qué buscamos en el Pesebre? el padre Ángel respondió: “La búsqueda de esa mirada de amor que nos hace sentirnos y sabernos amados, sabernos misionados, que nos lanza a una vida en abundancia”. “Voy al Pesebre a ver cuál es mi misión, cuál de estos frutos ansío o estoy necesitando encontrar, y aquí -dijo- hay que animarse a dejarse encontrar”.

“A veces buscamos donde no está -indicó- por eso es importante aprender el oficio de discernir, que se aprende con el trato con el Señor, contemplándolo, dejándonos enseñar, preguntándole, eso es lo propio de este tiempo de Adviento”, señaló el sacerdote jesuita.

En este sentido, el padre Ángel, nos invitó a “Dejarnos enseñar por todas las enseñanzas: por la pobreza, la fidelidad, el silencio”. Y completó diciendo que “La contemplación es ir buscando lo que uno está buscando, la búsqueda de la felicidad, de la paz, de la alegría, estas búsquedas están en el ADN de nuestra naturaleza”, acertó.

“Contemplando al Niñito pidamos la gracia de encontrar nuestra misión”, indicó el Padre Ángel. Y citó la oración de San Anselmo: <Que te busque en mi deseo, que te desee en mi búsqueda, que te busque amándote y que te ame cuando te encuentre>”

Finalmente, en su reflexión nos animó a pensar en lo que busco cuando voy al Pesebre: “Uno cuando va a una casa, va con una intención, cuando voy al Pesebre ¿Qué busco? Tendríamos que animarnos a ponerle nombre a lo que más ansiamos o a lo que sentimos que necesitamos en este tiempo”.

“Vayamos a Belén a ver que es lo que el Señor tiene reservado para nosotros, o para poner al pie del Pesebre nuestro corazón con todos sus anhelos”, culminó.