El 22 de febrero la Iglesia celebra la festividad de la Cátedra de San Pedro, una ocasión que se remonta al cuarto siglo y con la que se rinde homenaje y se celebra el primado y la autoridad de San Pedro. Hoy recemos de un modo particular por el Papa Francisco y por su misión como sucesor de San Pedro.
La palabra “cátedra” significa asiento o trono y es la raíz de la palabra catedral, la iglesia donde un obispo predica y sirve. Sinónimo de cátedra es también “sede” (asiento o sitial): la “sede” es el lugar desde donde un obispo gobierna su diócesis. Por ejemplo, la Santa Sede es la sede del obispo de Roma, el Papa.
San Juan Pablo II recordó que “la festividad litúrgica de la Cátedra de San Pedro subraya el singular ministerio que el Señor confió al jefe de los apóstoles, de confirmar y guiar a la Iglesia en la unidad de la fe. En esto consiste el ‘ministerium petrinum’, ese servicio peculiar que el obispo de Roma está llamado a rendir a todo el pueblo cristiano. Misión indispensable, que no se basa en prerrogativas humanas, sino en Cristo mismo como piedra angular de la comunidad eclesial”. “Recemos -dijo- para que la Iglesia, en la variedad de culturas, lenguas y tradiciones, sea unánime en creer y profesar las verdades de fe y de moral transmitidas por los apóstoles”.
Jesús confió a Pedro las llaves para que abriera la entrada del Reino de los cielos, no para que la cerrase. — Papa Francisco (@Pontifex_es) 22 de febrero de 2017
Jesús confió a Pedro las llaves para que abriera la entrada del Reino de los cielos, no para que la cerrase.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) 22 de febrero de 2017