Como «madre», la Iglesia siempre se interesó por la educación

27/12/2018 – En el quinto programa del ciclo sobre la fe en la historia argentina, el padre Juan José Riba habló de Domingo Faustino Sarmiento, de la ley de educación laica, pública y gratuita, del Golpe de Estado de 1930 y del Congreso Eucarístico Nacional.

El padre Juan José Riba, pertenece al Instituto de los Padres de Schoenstatt, y es autor del libro “Raíces de mi tierra”, un ensayo sobre la Iglesia en Argentina. En el último programa del ciclo de este año con el padre Riba, tratamos varios momentos de la historia argentina.

Al abordar el tema de la ley de educación laica, pública y gratuita, el padre Riba sostuvo que en 1918 “la mayoría de las instituciones educativas pertenecían a la Iglesia. La Iglesia siempre se interesó por la educación porque tiene corazón de madre y toda madre verdadera educa a sus hijos, le sale espontáneamente. Y había ordenes que se dedicaban a eso: los dominicos, los franciscanos”.

El debate puntual que se impulsa por la ley de educación laica produce un resquemor no solo con la jerarquía de la Iglesia sino también con la gente que dirigía.

El sacerdote remarcó que “se hablaba de educación laica, pública y gratuita. En el famoso Congreso Pedagógico, en el primero que se realizó donde actúan Estada y Goyena, la parte de “pública y gratuita” la liquidaron rápido, estaban todos de acuerdo. El tema de fondo fue el como se describe lo laico”.

El padre Riba destacó la figura de Domingo Faustino Sarmiento de quién dijo: “Sarmiento fue el gran precursor, fue el genio de todo el tema de la institución del la educación pública. Era un genio, era un profeta laico pero no tuvo, en ese tiempo, gente dentro de la Iglesia que pudiera seguirle el paso y discutir los temas”.

Al abordar el tema del golpe de Golpe de Estado de 1930 el padre Juan José Riva destacó: “fue la primera vez que el Argentino experimenta lo que es la falta de la Democracia y, curiosamente, al mismo tiempo el anhelo y la necesidad de vivir en Democracia”.

Finalmente el padre Riba hizo referencia al Congreso Eucarístico Nacional del cual consideró: “Realmente fue un congreso impresionante y la que más se aprovechó de eso fue la Acción Católica porque movilizó la presencia del laicado en la sociedad”.