Hinchas que linchan

miércoles, 13 de marzo de 2019
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El momento en el que Balbo es arrojado desde la tribuna del estadio Mario Kempes

13/03/2019 – El 15 de abril de 2017, en la ciudad de Córdoba, en el estadio Mario Kempes, y durante el clásico entre Belgrano y Talleres se registró uno de los actos de violencia en fútbol más brutales de los últimos tiempos.

Aquel día, fue asesinado Emanuel Balbo, un joven de 22 años, hincha de Belgrano que fue arrojado desde la tribuna Daniel Willington por un grupo de salvajes que lo acusaba “de ser hincha de la T”.

A casi dos años de este hecho, la Cámara Décima Segunda del Crimen de Córdoba condenó recientemente a los acusados del crimen, entre ellos a Oscar “Sapito” Gómez a 15 años de prisión por homicidio agravado e instigador.

El fiscal del Caso, Mariano Antuña, dijo que lo que más asusta de la situación que se vivió en abril de 2017 con la muerte del hincha en el partido de Belgrano es que “fue un crimen de hincha comunes”.

“No había barras bravas y salvo la relación previa de Balbo con Gómez, el resto eran hinchas comunes”, advirtió Antuña quien, en diálogo con Radio María Argentina agregó: “Esto es fácilmente de ver, es esto de la cultura del aguante. De tomar como normales conductas que no lo son y que son verdaderamente antisociales.

Al reflexionar, el fiscal expresó: “Nosotros no vamos por la calle insultando gente pero parece que en la cancha es lo más normal del mundo y esto genera el caldo de cultivo para que se desarrolle esta lógica bélica que se ha desatado en las canchas del fútbol argentino”.

La de Balbo fue una de las más de 300 muertes que ha dejado el fútbol argentino. Más de 300 muertes, es esta un cifra que, pese a estar contextualizada en el entorno del fútbol, no responde a cuestiones balompédicas, sino a problemas sociales, culturales y políticos dentro de un embudo donde todo se maximiza.

Pablo Albarces es doctor es sociología, especializado en cultura popular y fútbol y la violencia generada en este ámbito. Al respecto, y en contacto con nuestra emisora Albarces subrayó: “El caso Balbo es una especie de prueba definitiva de aquello que venimos sosteniendo hace mucho y que es esta idea de que cargar las tintas sobre la barrabrava como el único problema que tiene el fútbol es una forma de desviar la atención de problemas mucho más graves que tiene el fútbol”.