Llegaron desde Venezuela escapando de la crisis y agradecen la hospitalidad argentina

martes, 23 de enero de 2018
image_pdfimage_print


WhatsApp Image 2018-01-23 at 14.20.00

23/01/2018 – James Ball y Luisa Velázquez llegaron a Córdoba en diciembre pasado junto con dos de sus tres hijos. Sin futuro en su país sumergido en la crisis económica, política y social, buscan trabajo y una vida normal en nuestro país como otros miles de venezolanos.

Después de varios años la crisis política, económica y social en Venezuela se sigue profundizando. El PBI no para de caer desde 2010 a un ritmo estrepitoso. La inflación alcanzó 525 por ciento en 2016; cerca de 2.700 por ciento el año pasado y estiman que este año llegará a 7 mil por ciento anual.

En pesos argentinos, el salario básico en Venezuela es de 1.933 pesos. Un pollo (para comer) cuesta hoy el equivalente a 773 pesos de nuestra moneda.

Para comprar azúcar, leche, medicamentos, hay que hacer varias horas de fila. Y no siempre se consigue. La dieta de los venezolanos se va reduciendo cada vez más a frutas y verduras.

Más allá de toda consideración política o ideológica la realidad indica que hoy se hace difícil vivir de manera normal en Venezuela. Eso dificulta los proyectos personales, familiares y comunitarios.

James Walter Ball y Luisa Velázquez conforman un matrimonio de más de 25 años de casados, con tres hijos (la más grande ya casada, una joven de 19 años y un niño de 12 años). En medio de estas circunstancias, sin ver soluciones en el corto plazo, decidieron hace algunas semanas vender todo lo que tenían en su país y emigrar hacia Argentina en busca de un futuro mejor.

Sobre esta experiencia James, que es licenciado en Marketing y que trabajó en varias empresas en su país, sostuvo: “El sueldo básico, mínimo en Venezuela está alderredor del millón de bolívares (1.933 pesos argentinos) y un pollo está alrededor de los 400 mil bolívares (773 pesos argentinos); el kilo de carne está por encima de los 350 mil bolívares (676 pesos argentinos) así que si te compras un pollo y un kilo de carne terminás comiéndote todo el sueldo”.

Luisa, que es ingeniera civil, explicó: “La escasez de comida, de producción del propio país se ha incrementado y la situación se ha puesto muy cruda, y ya no se consiguen medicamentos ni lo que son los elementos básicos para poder vivir, para poder tener una vida sana”.

Ambos están buscando trabajo, en medio de la preocupación que les genera el agotamiento de sus ahorros por la necesidad de alquilar un pequeño departamento donde vivir.

Han repartido curriculums, y ya han recibido algunas convocatorias, mientras sus hijos se preparan para comenzar a estudiar medicina y la escuela secundaria.

“Estamos muy agradecidos con los argentinos y con los cordobeses porque en este tiempo nos han recibido muy bien, en particular la familia que nos ayuda mucho para instalarnos”, coincidieron en diálogo con Radio María.

James y Luisa estan necesitando la ayuda de todos nosotros. Para los interesados en colaborar con ellos pueden comunicarse a los siguientes teléfonos: 0351- 152045939 /0351-158119421

Piden oraciones


2

El padre Enrique Yánez es un sacerdote venezolano que está a cargo de la parroquia Nuestra Señora del Rosario de la Arquidiócesis de Caracas, la capital de Venezuela. En diálogo con nuestra emisora, el sacerdote relató que “en las últimas horas se han retomado las protestas en las calles con el saldo de cuatro jóvenes heridos por enfrentamientos con la Policía Nacional. Se ha agudizado muchísimo el tema del hambre, de la escasez, de la falta de medicamentos. Estos últimos días han sido terribles para mucha gente a las que les faltan los elementos básicos para su subsistencia”.

El padre Yánez pidió oraciones por Venezuela y por su pueblo, y subrayó la importancia de que la situación en su país sea difundida para lograr la necesaria solidaridad de todos los países del mundo.

Vale remarcar que, la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela ha convocado a elecciones presidenciales en el primer cuatrimestre de 2018, por tanto antes del 30 de abril, según un decreto leído por el diputado constituyente Diosdado Cabello, uno de los hombres fuertes del régimen del presidente Nicolás Maduro.