General Roca

Después de un sábado de descanso en Neuquén, bellísima ciudad de la Patagonia Argentina, que se encuentra a la espera de la señal de Radio María, nuestro andar peregrino misionero tomó rumbo hacia la provincia de Río Negro donde nos vimos sorprendidos por Rubén, encargado de la parrilla de unos de los comedores más concurridos de la ciudad, que al ver la presencia del móvil de Radio María abrí la ventana de su lugar de trabajo, subió el volumen de la radio y dijo: “Los estoy escuhando”. Después de seguir sus precisas indicaciones de lugar por recorrer y de habernos instalado en nuestro lugar de descanso, sobre el medio día rionegrino nos dirigimos hacia el sur, cruzamos el Río Negro y después de atravesar la zona del parador “La Pulpería”, nos encontramos con una sorpresa de María que una vez más nos alcanzó con su delicadeza. Un cartel recaba: “Gruta a María Misionera”, justo el día en que la Iglesia toda en el vigésimo octavo domingo del tiempo ordinario, celebró el día dedicado a las misiones. Con Diego rápidamente leímos el mensaje mariano, la Virgen vestida de poncho sureño nos decía que nos acompañaba en el camino y celebraba con nosotros el hecho de estar misionando en el sur. Después de orar junto a la Madre, en el parador nos detuvimos para degustar una carne con papas al horno que nos hizo sentir como en casa.

Después del descanso de la siesta y de haber celebrado la misa, se llegaron a nuestro lugar de descanso tres miembros de la comunidad difusora de Radio María en Río Negro: Enrique, Mirta y Norma, con quienes compartimos unos ricos sanwitchs tostados y agua tónica (la bebida oficial de la misión jaja:). La verdad se ha dicha, el cariño de la comunidad radiomariana rionegrina nos hizo pasar una tarde noche en familia gozando de los relatos anecdóticos con los que María se hace lugar en medio de todas las dificultades que ofrece la llegada de su señal. Cada vez más junto a los que hacen camino con María en esta radio, aprendemos a disfrutar de sus aventuras peregrinas.

Después de saludarnos y desearnos un buen descanso, nos despedimos de nuestros amigos para disponernos al encuentro del día lunes a realizarse en la catedral de la Iglesia local.

 

El lunes comenzó de la mejor manera, después de despertarnos a las 6 de la mañana, celebramos la Eucaristía con laudes bien temprano y después de terminar, Diego partió para encontrarse con Enrique en la Iglesia Catedral, mientras el Padre Javier terminaba de preparar los detalles que hacían al anuncio de la catequesis.

A las 8 en punto y con la presencia de mayor número de gente participando en la catequesis de lo que hasta aquí hemos recorrido (200 personas) compartimos el anuncio: “La cruz en el centro de la predicación misionera”. En medio de la misma se hizo presente el Obispo de Alto Valle de Río Negro, Monseñor Marcelo Cuenca a quien toda la audiencia allí presente, recibió con un fuerte aplauso reconociéndolo como su pastor.

Al final del encuentro, después de recibir a los oyentes que se comunicaron con nosotros a través de las distintas vías, el Padre Marcelo nos compartió su alegría por el lugar donde la Iglesia le confió el ministerio episcopal, los desafíos que la tarea evangelizadora tiene por esta región describiendo con precisión y claridad el territorio que hoy cobija su acción pastoral.

Una vez terminada la catequesis, con un fuerte aplauso los oyentes saludaron la catequesis misionera y nos dispusimos para algunas fotos y el cariñoso saludo con el que nos reconocíamos una vez más como miembros de una misma familia.

Frente a la Iglesia Catedral, se encuentra el colegio de las Hermanas María Auxiliadora, ellas con cariño de madres habían preparado un desayuno y un recorrido por el establecimiento donde se hospedan las antenas y el equipo transmisor de Radio María. Nos dimos la bendición mutuamente, nosotros a ellos por toda la tarea que queda por hacer en el tiempo que vendrá, y ellos a nosotros por todo lo que supone el andar misionero peregrino por tierras patagónicas.

Ya, sobre la despedida de nuestro encuentro, nos esperaba en la puerta de la comunidad de las hermanas, Sandra una joven oyente de Radio María en Villa Regina quien nos agradeció por nuestro viaje y a quién entregamos la imagen de María Peregrina para que misione entre la audiencia de su ciudad.