La previa del viaje de Francisco a África: “Prefiero una Iglesia accidentada”

24/11/2015 – “Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades” (EG 49). Es el momento de hacer realidad esta frase como una de las tantas que marcan el programa y estilo evangelizador del Pontificado de Francisco.

Sin dudas, por las actuales circunstancias de persecución de los cristianos y de los ataques terroristas en distintas partes del mundo, el próximo viaje a África entre el 25 y 30 de noviembre, es el más riesgoso de los que ha emprendido el líder de la Iglesia Católica. Son las periferias de la pobreza que conmueven las entrañas de este buen pastor que no mide riesgos, con tal de acercarse a los más pobres entre los pobres. Durante todo el recorrido se trasladará en el papamóvil descubierto que le permitirá tener contacto directo con la gente.

“El Papa Francisco visitará el África como mensajero de paz y de reconciliación”, dijo el Director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el P. Federico Lombardi, cuando presentó el 11° Viaje Apostólico a Kenia, Uganda y República Centroafricana.

Entre los temas sobresalientes de este viaje, el P. Lombardi indicó que se encuentran la paz, el testimonio de los mártires cristianos, el diálogo interreligioso y el encuentro con los últimos y marginados de las periferias.

El Continente africano, señaló el Director de la oficina de Prensa, es ahora el protagonista de este viaje. Continente que también fue visitado por San Juan Pablo II, que peregrinó por 42 Estados africanos, casi la totalidad del continente.

En Kenia, se debe resaltar, afirmó el Portavoz Vaticano, el discurso que el Santo Padre pronunciará en la Sede de las Naciones Unidas para el Ambiente y el hábitat. En este sentido, se espera un amplio discurso sobre los temas de la “Laudato Si”. Otro momento significativo será la visita a “Kangemi”, un barrio de la capital de este país. Aquí el Papa pronunciará un discurso en continuidad con el que pronunció a los Movimientos Populares en Bolivia. Luego seguirá el encuentro con los jóvenes kenianos. “Son jóvenes que necesitan ser animados, ser alentados para mirar adelante, en una situación en la que no es fácil dar testimonio cristiano y buscar las vías para un desarrollo adecuado”, aclaró Lombardi.

El viernes 27 de noviembre, el Pontífice se trasladará a Uganda, donde el momento central será la Misa por los Mártires ugandeses, seguida de la visita a la obra de solidaridad de los jesuitas, la Casa de la Caridad de Nalukolongo. En Uganda existen 288 Instituciones sanitarias promovidas por la Iglesia católica. “En la visita a Uganda, el evento de los mártires ugandeses es central. Sabemos también cuánto importante es el tema del martirio para el Papa, lo hemos visto en Corea en especial, aquí lo volveremos a ver en Uganda”, afirmó Lombardi. Además recordó que fue el Beato Pablo VI el primer Papa en visitar este país en 1969.

El domingo 29, finalmente, Francisco llegará a la República Centroafricana, una tierra herida por la violencia. Allí testimoniará su cercanía y dará un gran signo de paz a partir de la visita a un campo de refugiados y a una parroquia católica, donde se reciben a más de dos mil refugiados. “Sabemos que el objetivo por el cual el Papa va a la República Centroafricana es aquel de manifestar su cercanía al pueblo que sufre por los conflictos y las tensiones, pues la visita al campo de refugiados es un primum para el Papa y es lo primero que hará después de haber encontrado a las Autoridades”.

El Papa, en relación a su próximo viaje, indicó que el Evangelio pide “abrir nuestros corazones a los demás, especialmente a los pobres” y a los que viven necesidades. En un mensaje a los Keniatas y Ugandeses dijo que va “como ministro del Evangelio, para proclamar el amor de Jesucristo y de su mensaje de reconciliación, de perdón y de paz”. Francisco desea “encontrar a todas las personas de Kenya y Uganda, y ofrecer a todos una palabra de ánimo. Vivimos en una época en la que los creyentes y las personas de buena voluntad, son llamadas a promover la comprensión y el respeto reciproco, y a sostenerse los unos a los otros como miembros de nuestra familia humana”.

Después anunció que los momentos importantes de esta visita a África “serán los encuentros con los jóvenes, que son su mayor recurso y nuestra esperanza más prometedora para un futuro de solidaridad, de paz y de progreso”.

El Pontífice refiriéndose a República Centro Africana dijo: “Tendré la alegría de abrir para ustedes, anticipadamente, el Jubileo de la Misericordia, que será para todos, espero, la ocasión providencial para un auténtico perdón, que dar y que recibir, y una renovación en el amor”

Francisco mandó “un saludo con gran afecto, independientemente de la pertenencia étnica o religiosa». Después explicó: «Esta es la primera vez de mi vida que voy al continente africano, tan bello y tan rico en su naturaleza, su gente y sus culturas; y me espero grandes descubrimientos y encuentros enriquecedores”.

También se refirió a la difícil situación que vive la República Centroafricana, “su querido país tiene desde hace mucho tiempo una situación de violencia y de inseguridad, de la cual muchos de ustedes son víctimas inocentes. El objetivo de mi visita es sobre todo llevarles, en nombre de Jesús, el alivio del consuelo y la esperanza. Espero sinceramente que mi visita pueda contribuir de una u otra forma a curar las heridas y abrir un futuro más luminoso para República Centroafricana y todos sus habitantes”.

El Papa retomó también el lema de la visita: “Pasemos a la otra orilla”. Un tema, indicó, que invita a “sus comunidades cristianas a ver hacia adelante con determinación y que anima a cada uno a renovar la propia relación con Dios y con los propios hermanos, para construir un mundo más justo y fraterno”.

Padre Javier Soteras

Director de Radio María Argentina