El Papa instituye nuevo ciclo de estudios sobre ecología en la Universidad Pontificia

jueves, 7 de octubre de 2021
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Foto: En la Pontificia Universidad Lateranense, el Papa firma la Convención de la Unesco en presencia del Rector Buonomo y del Patriarca Bartolomé
(Foto: Vatican News)

07/10/2021 – El Papa Francisco instituyó este 7 de octubre un ciclo de estudios sobre “Ecología y Ambiente. Cuidado de nuestra casa común y protección de la creación” que se llevará a cabo en la Pontificia Universidad Lateranense de Roma.

En una carta dirigida al vicario de la Diócesis de Roma, el Cardenal Angelo De Donatis, el Santo Padre describió las motivaciones de esta iniciativa conjunta con el Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I.

En primer lugar, el Papa subrayó que “es gracias al Patriarcado Ecuménico de Constantinopla que ha madurado entre los cristianos la preocupación por la cuestión ecológica, por preservar los dones de la creación, del patrimonio natural, incluso a través de numerosas iniciativas de sensibilización y exhortación a los creyentes y a otras comunidades religiosas a respetar el medio ambiente”.

Además, el Santo Padre recordó que “en la Iglesia Católica, la preocupación por la protección de la creación está arraigada en el patrimonio de reflexiones, ideas e instrumentos de acción contenidos en su doctrina social”.

De este modo, el Papa indicó que el nuevo ciclo de estudios en “Ecología y Ambiente. Cuidado de nuestra casa común y protección de la creación” formará parte del “sistema de estudios eclesiásticos entre las otras ciencias, principalmente las humanidades, que están más estrechamente relacionadas con las disciplinas teológicas o la labor de evangelización”.

En esta línea, el nuevo ciclo de estudios “se estructurará en los campos disciplinarios de la teología, la filosofía, el derecho y todas las ciencias del ámbito económico, social, ecológico y ambiental, de manera que sea capaz de generar esa unidad del saber en la distinción y el respeto de sus múltiples expresiones relacionadas y convergentes”.

Así, la Pontificia Universidad Lateranense conferirá, con la autoridad de la Santa Sede, los grados académicos previstos para los tres ciclos de la enseñanza universitaria en forma de grados conjuntos (“joint degree”), dobles grados (“double degree”) y grados equivalentes (“equivalent degree”) y agregó que otros tipos de titulaciones serán definidas junto al Patriarcado Ecuménico de Constantinopla o con otras Iglesias cristianas y comunidades de creyentes que deseen sumarse a la nueva vía académica.

Asimismo, el Papa recordó que la Universitas es “un lugar simbólico del humanismo integral que necesita renovarse y enriquecerse constantemente mediante el entrelazamiento del conocimiento, las artes y las ciencias” por lo que “es necesario que la enseñanza universitaria sea capaz de responder a los numerosos desafíos que se plantean en la actualidad a la humanidad en su conjunto y a las comunidades de creyentes, proponiendo un impulso cultural valiente y coherente y un proyecto científicamente válido”.

En este sentido, el Santo Padre resaltó que ante la “llamada a educar en la responsabilidad por los dones de la creación, la Iglesia cumple también su compromiso educando en el verdadero sentido de toda acción encaminada a preservar, proteger y garantizar la vida sobre y de la tierra, consciente de que ésta es una obligación a la que todos están llamados, en sus diferentes funciones y tareas”.

Finalmente, el Papa describió que este nuevo ciclo de estudios incluirá también la “Cátedra UNESCO. Sobre el futuro de la educación para la sostenibilidad” con el fin de promover un “sistema abierto” de investigación y formación para “sensibilizar y fomentar, a escala mundial, la educación de las jóvenes generaciones en la responsabilidad ecológica, las garantías medioambientales y la deseada sostenibilidad”.

Finalmente, el Santo Padre concluyó que está seguro del “compromiso de todos, profesores, alumnos y personal no docente, que trabajarán juntos para garantizar una sólida preparación de los sacerdotes, de las personas consagradas y de los laicos, trabajando siempre con humildad, sobriedad y espíritu de sacrificio, cualidades esenciales para construir, también a través del estudio y la investigación, esa amistad social que es el fundamento de la fraternidad”.