Francisco, pastor con olor a oveja, visitó un pesebre viviente en Roma

martes, 7 de enero de 2014
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07/01/2014 – Ayer, en la fiesta de la Epifanía del Señor, el Papa Francisco sorprendió con una visita al "Belén viviente" de la parroquia San Alfonso María de Ligorio, ubicada en las afueras de Roma. "¡Viva Jesús, viva José, viva María!", dijo el Papa, al felicitar a los fieles que interpretaban el nacimiento del Señor. El Santo Padre fue recibido por el párroco, Padre Darío Pompeo Criscuoli, y el Cardenal Vicario de Roma, Monseñor Agostino Vallini. Luego visitó las diferentes escenas del pesebre saludando, uno por uno, a los más de 200 actores.

En una de las postales de la visita, los actores "pastorcitos" colocaron por unos instantes a un joven cordero sobre los hombros del Santo Padre. Asimismo, llamó especialmente la atención la imagen del Pontífice bendiciendo a los representantes de José, María y el Niño Jesús, cuyo intérprete tenía tan solo dos meses de edad y había recibido el Sacramento del Bautismo esa misma mañana, con el nombre de Francisco.

Hacia el momento de la despedida, el Santo Padre saludó a los cientos de fieles, niños, discapacitados y enfermos, y aseguró a la multitud de creyentes que "Jesús está siempre con nosotros". La visita duró una hora y media y durante su estancia, el Santo Padre visitó tanto el exterior como el interior de la parroquia. También tuvo un momento de recogimiento y de oración privada.

El Padre Criscuoli explicó que invitó al Pontífice con solo tres días de anticipación y que, de inmediato, recibió la confirmación papal. “Les agradezco por la acogida y por el fervor cristiano que tienen. Agradezco a esta comunidad por ese hermoso pesebre que han hecho con tanto trabajo y la buena catequesis que saben dar. Termina la Navidad y comienza el año. ¡Pero Jesús siempre se queda con nosotros!”, indicó el Papa al momento de visitar el pesebre viviente.

 

Aciprensa / Rome Reports