Cuando dormir poco es un problema

martes, 15 de octubre de 2013
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15/10/2013 –   Cada vez son más comunes los problemas vinculados al sueño que tienen las personas. El uso de la tecnología muchas veces es causante de que cada día nos acostemos más tarde. Por ejemplo, la televisión que tiene el pico de raiting a las 23hs lo cual suma horas en la "deuda del sueño". También aparecen otros factores, como el gran número de actividades que aparecen en las agendas, las actividades nocturnas instaladas socialmente como esparcimiento.

El Dr. Daniel Cardinalli, médico y Doctor en Ciencias Biológicas e Investigador Superior del CONICET, comentó que "desde el punto de vista médico el problema es complejo" porque estamos durmiendo en promedio 6hs que son dos horas menos a las que se dormían hace 30 o 40 años. Apartir de la falta de sueño emergen patologías serias como la diabetes, la obesidad, la hipertensión arterial y ciertas patologías tumorales. Hay que puntualizarlo, se hacen estudios que indican la sospecha fuerte pero no la causalidad directa, que sólo es posible de comprobar con animales.  

Además,el Dr. Cardinalli comentó los problemas que acarrean la falta de sueño en los niños y jóvenes a quienes se le dificulta el proceso de aprendizaje: "yo no funciono ni aprendo adecuadamente si no tengo las horas de sueño necesarias. Cuando me privo de sueño pero lo recupero el fin de semana, se me pierde la memoria inmediata que fija el conocimiento en las primeras 24hs. Esto genera un problema serio en la educación".

Además indicó que "es la sociedad quien tiene que tomar en cuenta que dormir no es perder el tiempo sino que afecta lo cognitivo, lo emocional y lo físico de nuestros ciudadanos". 

El peligro de dormir poco

 "El 40% de la población está durmiendo menos de lo que necesita, según el Observatorio de la UCA", citó el Dr. Cardinalli en diálogo con Radio María. El problema aumenta, indicó el especialista, cuando nos encontramos con que "hay decenas de personas somnolientas manejando contra una o dos personas alcoholizadas". Eso indicaría que la falta de sueño es mucho más grave en el porcentaje de accidentes fatales que el consumo de alcohol, ya que "la respuesta al volante es bajísima".