09/10/2018 – Monseñor Jorge Casaretto, obispo emérito de San Isidro, se sumó al ministerio episcopal en diciembre de 1976 cuando el entonces papa Pablo VI lo eligió obispo de Rafaela. Ante la cercana canonización de quien fuera el italiano Giovanni Montini este domingo 14 de octubre en Roma, monseñor Casaretto lo definió como “un papa extraordinario. Me llena de alegría que la Iglesia haya podido demostrar que Pablo VI fue santo”. El obispo bonaerense destacó que “tenía un gran misticismo, una vida interior muy fuerte. Además le tocó terminar el Concilio Vaticano II y comenzar a aplicarlo. Esa fue su gran obra, pero también le significó mucho sufrimiento interior”.
Monseñor Casaretto recordó que “me nombró obispo y al año murió. Solo estuve con él en persona cuando yo era todavía sacerdote”. Asimismo, sostuvo que “Pablo VI transmitía una gran mansedumbre, mucha paz. En su mirada se notaba que tenía una relación personal con Dios muy fuerte e intensa. Era un místico”. Además, monseñor Casaretto subrayó la gran cantidad de documentos que el papa Montini emitió durante su pontificado.
Pablo VI se llamaba Giovanni Battista Enrico Antonio Maria Montini, habia nacido en Concesio, cerca de Brescia, en la región italiana de la Lombardia el 26 de septiembre de 1897 y murió en Castel Gandolfo, el 6 de agosto de 1978.
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