04/10/2021 – Hace ya dos años el Papa Francisco convocó a los jóvenes economistas, emprendedores y emprendedoras de todo el mundo a trabajar en lo que iba a ser un Congreso o un Simposio Internacional sobre la economía que le hace falta al mundo para superar la injusticia social, los problemas en la distribución de los recursos, la pobreza, la marginalidad, la desigualdad entre países ricos y pobres, etc. Así nació la Economía de Francisco, por Francisco de Asís, el pobre de Asís que hizo de la austeridad una virtud santificante.
El tema es que lo que iba a ser un Congreso, por iniciativa del Papa y de muchos jóvenes en distintas partes del mundo se convirtió en un verdadero movimiento mundial, que por estos días tuvo un nuevo evento internacional.
La Economía de Francisco ha inspirado cientos de iniciativas y ha generando numerosos proyectos así como vías de reflexión y acción en muchos países del mundo.
Para hablar sobre dialogamos con Agustina Brizuela, joven economista integrante de la Economía de Francisco.
En este marco hay que poner también la mirada en un aspecto puntual de la propuesta: la del consumo responsable, para pasar del consumismo a la austeridad porque eso nos hará bien personalmente pero también a la tierra, al planeta, a la Casa común, tan afectada por culpa de la producción excesiva que quiere llenar a los consumistas excesivos. ¿Vivimos en una cultura del consumo?¿Consumimos para vivir o vivimos para consumir?¿Cómo nos afecta este deseo a veces desordenado y descontrolado por consumir?
Le trasladamos estos y otros interrogantes a Ernestina Arhancet, experta en disturbios compulsivos, Doctora en Psicología por la Universidad J.F.Kennedy y Posgrado en Psicologiapedagogica por Universidad Complutense de Madrid-(España) y Master en Psicoinmunoneuroendocrinologia por la Universidad Favaloro.
Audios de las entrevista completas a continuación…
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