21/02/2022 – Como cada semana compartimos la experiencia y testimonio de los jóvenes misioneros de Puntos Corazón, un movimiento católico que ofrece una misión al servicio de los que más sufren. Son jóvenes voluntarios que buscan a Dios y desean servir a los más pobres y pequeños compartiendo una vida simple y viviendo en comunidades internacionales.
En esta oportunidad nos acompañó Florencia Silvero, una joven enfermera de Buenos Aires, que fue enviada de misión a una ciudad llamada Casino Deportivo, en La Habana, Cuba. Florencia nos compartió cómo fue su proceso de adaptación y aprendizaje de lo que Dios quería para ella al enviarla a misionar:
“A veces nos cuesta mucho encontrar a Jesús en el día a día, en lo cotidiano, y eso fue lo que también me impulsó, porque trabajaba, estudiaba y me costaba mucho verlo en mi día a día, de relacionarme con Él. A veces iba a Misa y no tenía sentido a lo que iba o rezaba. Muchas veces me costaba concentrarme en la oración. Creo que fue en el momento justo donde Dios me llamó a eso, así como ahora que volví y estoy de nuevo acá. Así siento que Él me dijo: “Es ahí donde yo te voy a mostrar realmente quién soy, el verdadero sentido del amor”.
“En la misión uno aprende a amar de verdad y eso es lo que yo aprendí, a amar de una forma verdadera y en lo más sencillo, en lo cotidiano”, reflexionó Florencia
Te invitamos a escuchar el programa completo con el testimonio de Florencia en el audio que acompaña esta nota