28/07/2022 – En el Congreso de la Nación donde oficialistas y opositores no se ponen de acuerdo para aprobar leyes que reduzcan la inflación, que impulsen una sana economía para generar trabajo digno y una justa distribución de la riqueza, sí es posible que se pongan de acuerdo para legalizar la eutanasia.
Hay tres proyectos que tienen vigencia parlamentaria y que proponen legalizar la Eutanasia o, como le dicen quienes desean endulzar el concepto, legalizar “el derecho a morir” o el derecho a una “muerte médicamente asistida” o “MMA”.
Esto de cambiar el nombre es lo mismo que hicieron con el aborto, que legalizaron con el eufemismo de “Interrupción Voluntaria del Embarazo”.
El ARTICULO 83 del Código Penal de la nación argentina establece que “Será reprimido con prisión de uno a cuatro años, el que instigare a otro al suicidio o le ayudare a cometerlo, si el suicidio se hubiese tentado o consumado”. Es decir, la eutanasia es un delito, como lo era el aborto antes de que lo legalizaran.
Uno de los proyectos que proponen legalizar la eutanasia lleva el nombre de “Ley de Buena Muerte y regulación de la eutanasia”, y fue presentado el 26 de noviembre del 2021 por los diputados de la Unión Cívica Radical Alfredo Cornejo, Jimena Latorre y Alejandro Cacace. El segundo proyecto titulado “Ley de Interrupción Voluntaria de la Vida” fue presentado por los legisladores radicales Julio Cobos y Pamela Verasay, el 30 de noviembre pasado. El último se llama “Ley de Derecho a la Prestación de Ayuda para Morir Dignamente” o “Ley Alfonso”, fue presentado el 6 de diciembre y es impulsado por Gabriela Estévez, diputada kirchnerista cordobesa del Frente de Todos.
En los últimos días, la diputada Latorre presentó un pedido de tratamiento para su proyecto mediante el artículo 109. El apartado contempla que cuando tres o más diputados realizan esta solicitud, la presidencia de la comisión está obligada incluirlo en el temario, por lo que se espera que las iniciativas para la legalización de la eutanasia se puedan empezar a debatir luego del receso invernal.
Como hicieron con el proyecto de ley que legalizó el aborto, se buscará que la discusión en las comisiones sea de carácter informativa y para eso se invitará a especialistas de distintos campos para que den su visión al respecto.
Hablamos de esto con Nicolás Laferriere, que es Doctor en Ciencias Jurídicas, profesor de Bioética en la Maestría de Filosofía del Derecho en la Facultad de Derecho de la UBA, y presidente del Centro de Bioética, entre otras cosas.
“Lo que tiene que ser objeto de un derecho es lo que es exigible por justicia y lo que es exigible por justicia es el derecho a la vida, la vida plena, la vida digna”, ese es el telón de fondo.
“Para cuando venga el debate hay que tener en cuenta dos grandes narrativas detrás de los proyectos, que se confunden” comentó Laferriere.
“Por un lado hay una narrativa del dolor, de la angustia que dice ‘hay que ponerle fin al sufrimiento’ y para eso están los cuidados paliativos” y por otro lado está “la narrativa de la autonomía, el individuo que decide sobre su vida, que es una narrativa individualista y rompe los vínculos sociales; hay que distinguirlas bien y que los diputados y senadores aclaren cual problema quieren resolver”, enfatizó.
También hablamos con el padre Rubén Revello, quien es director del Instituto de Bioética de la Universidad Católica Argentina para que nos de su mirada al respecto.
“Nadie está obligado a sufrir, se acepta la sedación de las personas, pero no la sedación con intención eutanásica. Por eso se han creado los cuidados paliativos” dijo el padre Revello. “Se utilizan para cuando ya no es posible curar entonces que se pueda al menos cuidar a la persona, para que no tenga un sufrimiento innecesario”. Los cuidados paliativos están para brindar “contención psicológica, afectiva, analgésica, para atravesar ese período del modo más digno posible” comentó el especialista.
Con respecto a la utilización economicista de las personas el Padre Revello recordó lo que San Juan Pablo II llamaba como “cultura de la muerte, donde pocos que se sientan a la mesa y deciden”, acá van a decidir un grupo de legisladores (si avanza el debate) “pero no están presentes las personas ancianas internadas en hospitales o los enfermos de cáncer que están seis meses esperando un turno; entonces, los mismos que generan problemas hallan soluciones eliminando los problemas que ellos generaron”, comentó.
*Podés escuchar el programa completo desde la barra de audio.