19/09/2024 – En la Legislatura provincial, la oposición había propuesto la derogación de la ley que, como han expresado diversos especialistas, está provocando una generación de niños, adolescentes y jóvenes ludópatas.
Para impedir la derogación de la ley (que permite a cuatro empresas operar y promocionar apuestas virtuales), el oficialismo propuso una modificación de la ley 10.793 (con nuevos requisitos para las apuestas virtuales, como la incorporación de los datos biométricos para los jugadores, la prohibición de campañas publicitarias y la incorporación de un programa de prevención en la lucha contra las adicciones al juego).
En los hechos, esa modificación sostiene el negocio. Pero al oficialismo le costó bastante conseguir los votos necesarios: para hacerlo, mandó a pedir licencia a un legislador díscolo, hizo jurar a otro que sí le aseguraba el apoyo, y así logró que, con el doble voto del presidente provisorio de la Unicameral, el llaryorista Torres, se sostuviera la ley que blanquea el negocio y sus consecuencias.
Ayudaron a conformar esa mayoría oficialista los votos de Karina Bruno (del PRO) y del libertario Agustín Spaccesi. La mafia y los negocios de unos pocos siguen siendo más importantes que la salud integral de los niños, niñas y adolescentes para el poder político de Córdoba.
Dialogamos con el Padre Munir Bracco, de la Pastoral Social de Córdoba.
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