Adaptación y mitigación al cambio climático: acciones para el cuidado de la casa común

miércoles, 8 de marzo de 2023
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03/032023 – Junto a Fray Eduardo Agosta continuamos el ciclo en donde abordamos diversas temáticas medioambientales desde la Encíclica Laudato Si‘. El padre Eduardo es fraile carmelita, físico y doctor en ciencias de la Atmósfera y los Océanos. También es miembro del Movimiento Laudato Si y del Dicasterio Pontificio para el Desarrollo Humano Integral.

En un nuevo encuentro abordó la temática de la adaptación y mitigación al cambio climático, dos conceptos que suelen utilizarse de maneras similares como respuesta al problema del calentamiento global, pero que encierran significados diferentes.

Al respecto, Fray Agosta explicó que adaptación “significa prever los efectos perjudiciales que tiene el cambio climático en la población y por tanto adoptar medidas apropiadas” al contexto. Esto tiene relación con cambios en las conductas o en el comportamiento de las personas respecto al estilo de vida y las formas de consumo. Reducir nuestra huella de carbono, nuestro consumo indirecto de materiales asociados a los combustibles fósiles, para disminuir nuestra contaminación con gases de efecto invernadero.

En cambio, cuando hacemos referencia a mitigación en el cambio climático “vamos directamente al corazón del problema”, refirió Agosta. La mitigación tiene que ver con la reducción de concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera y, por tanto, en incorporar energías renovables para reducir las fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero, originadas en la explotación de petróleo, gas y carbón.

¿Qué medidas de adaptación y mitigación podemos adoptar frente al cambio climático?

La reforestación -principalmente cerca de las poblaciones humanas- que permite disminuir el calor de las grandes urbes; la rotación de cultivos -adaptados a las regiones-; el desarrollo de infraestructuras de protección -principalmente en las costas- para evitar inundaciones y los protocolos de sistemas de respuesta a emergencias climáticas son algunas de las medidas de adaptación que se pueden incorporar, enumeró Fray Agosta.

Por su parte, al planificar acciones de mitigación cobra principal importancia el uso de energías renovables para reducir la explotación de combustibles fósiles. Esto implica generar inversiones que financien la instalación y el desarrollo de energías alternativas, como así también la promoción de iniciativas de desinversión en combustibles fósiles.

Te invitamos a escuchar el programa completo en el audio que acompaña esta nota.