22/06/2021-“Como adultos, enseñarles a los chicos a hacerse responsables es crucial. Los niños no nacen “responsables”. Es un hábito que debemos enseñar y cuanto antes los chicos aprendan, mejor. No se trata de retarlos o de convertir la casa en un campo de batalla, sino de enseñarles a ser responsables y para ello, en vez de manejarnos con castigos y gritos, debemos manejarnos con consecuencias, y por sobre todas las cosas…enseñarles”, dijo Laura Lewin quien es especialista en educación y crianza y nos acompaña cada martes en el programa “Hoy puede ser” junto a Verónica La Forgia.
Adultos presentes
Somos seres sociales, y debemos relacionarnos con otros. ¿Qué pasaría si nadie se hiciera responsable de sus compromisos u obligaciones? Pero para enseñarles a hacerse responsables, el adulto debe “estar presente”, debe poder “ver” a los chicos. Cuando una persona está tan absorta en sí misma, deja de prestar atención. Cuantas veces vemos en un restaurant, por ejemplo, chicos correteando a los gritos, y los padres no hacen nada. Es como si no los vieran. El “estar” y “verlos” es clave para poder enseñarles.
Acompañar es fundamental
Si un niño no puede completar su tarea a tiempo, por ejemplo, en vez de culpar al docente porque le da mucha tarea, acompañémoslo, veamos por qué no pudo terminar, pensemos juntos a las causas y posibles soluciones, enseñémosle a hacer cambios o a mejorar sus hábitos de estudio, en vez de culpar a otro. Enseñémosle a hablar con su docente y explicarle qué pasó. Al hacerlo, les estamos enseñando a hacerse responsable de sus acciones y a corregir lo que deba para aprender de la situación y poder lograrlo la próxima vez. Si un niño se enoja con un amigo podemos preguntarle qué pasó, si hubo alguna razón para que su amigo se enojara. Lo podemos ayudar a pensar en cómo se sintió su amigo, y si corresponde, alentarlo a pedir disculpas.
Brindarles seguridad
También es importante ayudarlos a aceptar las consecuencias de sus decisiones. Conversar con ellos y ayudarlos a pensar en lo que hicieron, y ayudarlos a resolverlo, los va a ayudar a aprender por su propia satisfacción, no por medio a los reten. Cuando un niño se comporta de manera incorrecta, necesita saber que siempre están los brazos de sus padres donde poder desahogarse o llorar. Esta seguridad es crucial para que pueda aprender a manejar sus emociones y logre una auto-estima sana que les permita: * demorar la gratificación y poder esperar- aprender que a través del esfuerzo y la perseverancia puede lograr sus objetivos. * aprender de sus errores. * pedir ayuda cuando la necesita. * resolver sus problemas.
No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.
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