Cuando Dios mueve el alma y todo cambia inesperadamente

viernes, 10 de octubre de 2025

14/10/2025 – «A veces pensamos que nada va a pasar… y Dios transforma todo.». Así el Padre Humberto González S.J., conocido por su cercanía y mirada pastoral en el ciclo “Reflexiones para el finde” nos invita a detenernos y reflexionar sobre los momentos de la vida en los que, sin esperarlo, Dios irrumpe y nos transforma. En esta charla, nos acompaña hacia la figura de San Juan XXIII, el Papa de la sonrisa, y hacia la advocación mariana del Pilar, recordándonos que la grandeza de Dios se revela en lo humilde y sencillo.

San Juan XXIII: un Papa inesperado que transformó la Iglesia

Angelo Roncali, elegido Papa a los 77 años, era considerado un líder de transición. Sin embargo, su humildad, inteligencia y sentido del humor lo llevaron a convocar el Concilio Vaticano II, un hecho que transformó la Iglesia y marcó un antes y un después en la misión pastoral.

El Padre Humberto destaca que Juan XXIII vivió su vida con un corazón disponible: desde su labor diplomática en lugares difíciles, hasta su cercanía con los enfermos, encarcelados y poblaciones necesitadas. Su fe profunda, su devoción a la Virgen y su mirada amplia sobre la Iglesia lo hicieron un verdadero “pilar” de Dios en medio de su tiempo.

Entre sus gestos más conocidos se encuentra la ayuda a judíos perseguidos, su cercanía a los pobres y su famoso “discurso de la luna”, donde comparaba el Concilio con una caricia de Dios a sus hijos. Juan XXIII mostró que la santidad y la grandeza no dependen de los años o la fama, sino de la disponibilidad y el amor en lo cotidiano.

La Virgen del Pilar: ejemplo de humildad y fortaleza

El fin de semana también nos invita a celebrar a Nuestra Señora del Pilar, una advocación que nos recuerda que Dios trabaja a través de lo pequeño y lo humilde. La Virgen del Pilar, con su sencillez y cercanía, sostiene a la Iglesia y a sus hijos, enseñándonos que la fortaleza no está en los recursos o la fama, sino en la fe puesta en acción y el corazón dispuesto a servir.

El Padre Humberto subraya cómo las acciones pequeñas, silenciosas y humildes —como ayudar en la parroquia, colaborar con la comunidad o acompañar a quien lo necesita— son verdaderos pilares de misión. Así, los gestos cotidianos se transforman en oportunidades de gracia y entrega, siguiendo el ejemplo de Juan XXIII y la Virgen del Pilar.

Una reflexión para llevar

Esta charla nos recuerda que la vida cotidiana está llena de momentos inesperados donde Dios puede transformar lo más sencillo en algo extraordinario. Ya sea a través de un gesto de amor, un servicio humilde o la oración confiada, estamos invitados a ser instrumentos de Dios en lo pequeño, confiando en su providencia y acompañados por la Virgen, nuestra fortaleza y puerta del cielo.

Para profundizar en esta hermosa reflexión, podés ver el video completo , donde el Padre Humberto comparte oraciones, historias y anécdotas de San Juan XXIII y la Virgen del Pilar.