25/08/22 – Todos los jueves en “Acortando Distancias” dialogamos sobre educación junto a Laura Lewin, consultora y tallerista. “Trabajemos el manejo de las emociones para que les jueguen a favor y no en contra a los chicos. Desdramatizar, naturalizar y capitalizar el error”, dijo la especialista.
Hay una forma muy didáctica para recordar cuáles son las emociones básicas en el ser humano, y es a través del nombre MATIAS:
M = Miedo
A = Alegría
T = Tristeza
I = Ira
A = Asco
S = Sorpresa
Ante el enojo, muchas veces, no sabemos cómo manejar nuestros impulsos. Por eso, es muy importante, reconocer el enojo y luego tratar de separar la emoción de la acción a la que nos lleva ese estado de ánimo. Por ejemplo, el niño se enojó y automáticamente le pega a alguien. Hay que aprender a separar. Esto se logra a través de herramientas: desde contar hasta diez, interrumpir la actividad hasta estar más calmado, técnicas de respiración, describir con calma un objeto, etc.
Es importante que sepan que las emociones son temporarias, ya va a pasar. Aprender a pedir ayuda, o reírse de la situación (si es apropiado) ayudan a mitigar la presión. Debemos enseñarles a nuestros hijos a manejar el enojo y la frustración de una manera más saludable y productiva. Debemos darles permiso para sentirse inseguros, confundidos y hasta frustrados, pero también brindarles las herramientas para poder manejar esa frustración.
Una vez que haya pasado el “terremoto emocional”, es importante abordar lo ocurrido para que pueda manejar estas situaciones de maneras más saludables.
No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.