El Corazón De Las Llamas

En el día del Bombero Voluntario entrevistamos a los bomberos voluntarios de Unquillo, Mendiolaza y Cosquín quienes han luchado contra los incendios en las sierras de Córdoba.
 
Creo que todos los corazones humanos están preparados para vincularse con los otros seres humanos y con la vida de una manera amorosa, sienten la inclinación y la actitud de servir, de salir al servicio de los demás, de salvar, de cuidar. Solo que muchas veces los sistemas que construimos terminan ahogando o incendiando estas genuinas vocaciones

GL: ¿Cómo surge esa vocación en ustedes de ponerse en riesgo para salvar a otros? ¿En qué gestos de servicio ya tenían esa inclinación a servir a los demás? ¿De quién aprendieron esta actitud de salir al servicio de los demás? Es característica de los bomberos voluntarios la humildad.

–    Con un compañero, nos surgió primero la idea de cuidar. Y cuidar todo. Comenzamos yendo a limpiar el arroyo de la basura que deja la gente para cuidar la ecología, salvar el planeta. Luego vino lo de salvar vidas particulares, que ya es lo máximo.
–    Tengo familiares lejanos que formaron parte de cuarteles de bomberos. Mi vocación nació alrededor de los años 80 por un incendio forestal muy grande que hubo en Cosquín. En ese momento tenía más o menos 10 años y mis padres no me dejaron ingresar, pero la vocación siguió latente y cuando tuve edad suficiente para ingresar, ingresé como cadete. Creo que uno ya nace con esa vocación de servicio. Es difícil transmitir en palabras lo que uno siente
–    Lo mío viene de una vocación familiar que se contagia. Yo soy bombera, me casé e hice bombero a mi esposo y ahora tengo dos hijos que han ingresado y se sienten orgullosos de haber elegido eso. Además vamos por la calle y la sociedad toda nos reconoce, y ese reconocimiento no tiene paga
–    Para mí, esto surgió como necesidad de hacer algo por alguien pero no por “devolución”. Cuando decimos que “tenemos que devolver algo a la sociedad”, suena como que nos hemos llevado alguna cosa. Estas actitudes de hacer algo por otros se arrastran, son contagiosas. Además, me preocupa mucho el cuidado del medio ambiente. La función principal del bombero es salvar vidas, pero por otro lado el tema del medio ambiente en el caso de incendios forestales, también es una forma indirecta de salvar vidas. La cantidad de contaminantes que van al aire en cada incendio es grave.
–    En mi caso, creo que es una cuestión congénita. Mis padres han sido siempre solidarios. Además tuve la oportunidad de estar en la Marina de guerra, soy buzo e hice cursos de rescate (soy rescatista de alta mar). Después tuve una prueba muy dura: soy sobreviviente del Ara General Belgrano en la guerra de Malvinas.
Como vos dijiste, todos tenemos algo solidario adentro, que en algún momento se pone en práctica. Yo tuve la posibilidad de poder demostrármelo
      –      En mi caso, tiene que ver con cómo se nos enseña a apreciar la vida. La ley de la vida es dar, compartir, ayudar al prójimo. Eso es lo que aprendí de mis padres y mis abuelos: ¿para qué acumular cosas para uno? La vida es bonita si uno puede dar algo. y creo que uno no se puede sentir bien con uno mismo, no se puede sentir realizado si no da. Sin desmerecer la familia que tenemos, el Cuartel de Bomberos es una verdadera familia donde encontramos amor, compañerismo. Allí dentro todos quisiéramos que todo el mundo colabore con alguien para que el mundo sea mejor.

GL: ¿Qué significa la palabra BOMBERO?   
–    La palabra bombero viene de bomba. El bombero estaba asociado al tipo que por una bomba manual cargaba baldes de agua para apagar los incendios.
Los bomberos tienen muchas funciones: prevención de accidentes, control y extinción de incendios, primeros auxilios, salvamento de personas y animales en caso de emergencia, rescate y asistencia en accidentes de tránsito, cuidado del medio ambiente, y otros tipo de siniestros difíciles de catalogar.
Otra tarea importante es la formación de conciencia  y la transmisión a toda la comunidad de la necesidad de cuidar y proteger el medio ambiente

GL: ¿Por qué “primero la vida del otro y después la mía”? Cuándo sintieron adentro esa fuerza que los hace priorizar la vida del otro por encima de la suya? Hay valentías que superan los riesgos ¿cómo medir riesgos?
–    Hay un concepto del “no te metás” no solo en las cuestiones físicas sino también en las ideológicas, políticas…Hay que meterse, hay que hacer algo. Es una cosa muy simple y muy importante. Nuestra vocación tiene que ver con eso: nos metemos. No hay que pensarlo dos veces. Si me tocó en ese momento de necesidad estar allí por algo es. Creo que esta debería ser la actitud de todos: mirar más al costado a ver qué podemos hacer. Hay muchas pequeñas acciones: ayudar a alguien a cruzar una calle, no arrojar basura, no prender fuegos. Creo que no hay parámetros para medir lo que se puede hacer por los otros. Hay que hacerlo y no para jactarnos de lo que hicimos, sino que la satisfacción tiene que ser íntima. Eso es lo que uno siente cuando se ha metido en ayudar a quien necesita, sin necesidad de que la prensa los ponga como héroes en la tapa de los diarios: un saborcito de haber hecho algo que sirve.
–    Yo estoy como presidente de esta entidad, y me propuse dar el ejemplo de honestidad, transparencia, para que vean en este presidente una escuela. Creo que lo he logrado, y estoy orgulloso. He logrado hacer la central de bomberos donde no había ni un elemento para apagar llamas. Hice un semillero importante y tuve la gracia de que me acompañaron. Hoy toda mi familia es bombero, y mis nietos pintan que también lo van a hacer. Cuando uno sale a cumplir un servicio al frente de una dotación, siente el peso de que no solo lleva su vida sino la de sus compañeros. Por eso una mala decisión Dios no la permita, porque puede llegar a ocurrir lo peor y poner en riesgo a los propios compañeros. Si vemos un compañero que tiene una actitud heroica pero sumamente peligrosa, se entra en un conflicto, pero se termina tomando la decisión de hacer uno como responsable de la dotación eso más riesgoso. En esto pasa que hay una “cabeza pensante” y después está toda la gente que ejecútale plan de acción. Pero el encargado es el que toma la decisión y muchas veces es el que primero pone en riesgo su vida. Es una responsabilidad moral cariñosa.
–    Yo viví hace poco una situación que para mí fue la más difícil hasta ahora. En la inundación del mes de octubre que fue una de las crecientes más importantes, tuvimos una víctima: una nena de 10 años. Me tocó sacar su cuerpo sin vida del agua. Yo tengo hijos de esa edad y me representaron mis hijos. No hay mayor fracaso que perder una vida.
Resistiré
Cuando pierda todas las partidas , cuando duerma con la soledad
cuando se me cierren las salidas y la noche no me deje en paz

Cuando sienta miedo del silencio, cuando cueste mantenerse en pie
cuando se revelen los recuerdos y me pongan contra la pared

Resistiré, erguido frente a todo, me envolveré de hierro para endurecer la piel
y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
soy como el junco que se dobla pero siempre sigue en pie
Resistiré, para seguir viviendo, soportaré los golpes y jamás me rendiré
y aunque los sueños se me rompan en pedazos resistiré, resistiré…

Cuando el mundo pierda toda magia , cuando mi enemigo sea yo
cuando me apuñale la nostalgia y no reconozca ni mi voz

Cuando me amenace la locura, cuando en mi moneda salga cruz
cuando el diablo pase la factura o si alguna vez me faltas tú

Resistiré, erguido frente a todo, me envolveré de hierro para endurecer la piel
y aunque los vientos de la vida soplen fuerte
soy como el junco que se dobla pero siempre sigue en pie
Resistiré, para seguir viviendo soportaré los golpes y jamás me rendiré
y aunque los sueños se me rompan en pedazos resistiré, resistiré…

GL: Sé que ustedes tienen tan encarnado el servicio desinteresado por el otro que no están habituados a hablar de lo que ustedes hacen, y que es grandioso. Debe haber una gratificación espiritual muy profunda en lo que hacen, en comparación con lo cual la prensa, el reconocimiento, son basura.   
       Quiero ahora hacerles otra pregunta: Las personas que se enfrentan a situaciones de mucho riesgo –cirujanos, soldados, las profesiones que están en contacto con la muerte, con situaciones límite, suelen formar personalidades más bien duras, recias, porque es lo propio, es ‘la forma de’. Pero en ustedes, he visto en todos sin excepción, ‘lágrimas en los ojos’. ¿cómo puede ser que estas personas que están preparadas para estar en contacto con riesgos, con los muertos, con el infierno, con los accidentados y sus cuerpos destrozados…. No pierden la sensibilidad ni la ternura. Caso único. ¿cómo hacen?

–    Después de socorrer, nos hacemos un espacio para manifestar nuestras emociones, uno queda un poco shokeado, pero en el cuartel tenemos un tiempo donde nos desahogamos, contamos lo que pasó, y es una suerte de alivio, y de saber que lo que hicimos, lo hicimos bien.  A todos nos duele la pérdida de alguien o de algo, pero sabemos que después hay que seguir con firmeza, que siempre tiene que haber una cabeza fría pensante para lo que nos va a tocar.
–    Lo principal es no olvidarse de los valores desde las cuestiones más mínimas. Y mis tres hijos lo aprenden y muy bien. Me pongo un poco triste al ver las realidades que nos rodean: padres que no escuchan a sus hijos, jóvenes que se dedican a otras cosas y hasta se olvidan de ellos mismos. Creo que hay que tratar de rescatar valores como el amor, la solidaridad, la familia, la responsabilidad. Tratar de hacernos conscientes de que Dios nos regaló una vida y es para cuidarla y cuidar a la del semejante.
–    Yo veo en el mundo una violencia generalizada, y me da vergüenza el mundo que le vamos a entregar a nuestros hijos, porque son quienes van a sufrir nuestras negligencias

GL: ¿Cómo se forma un grupo humano tan unido como para poder suscitar la capacidad en cada uno de salvarle la vida al otro?
–     Creo que con la responsabilidad de la cabeza se forma hacia abajo una estructura de responsabilidad
–    Dentro del cuartel todos nos cuidamos. Y no solo somos familia dentro del cuartel sino que nuestras familias desde afuera también integran de alguna manera el cuartel y nos cuidan y nos apoyan. Y si alguien plantea si tengo miedo que les pase algo a mis hijos, creo que les puede pasar a ellos es lo mismo que nos puede pasar también a nosotros. No se trata de pensar si nos va a pasar algo o no: hay un valor más grande que supera el miedo. Y los hijos también saben respetar la decisión de sus papás de jugarse la vida porque saben que esa es la verdadera vocación y lo hacen con gusto, con amor.
–    Cotidianamente vivimos el amor. No se puede expresar con palabras. Cada día tenemos más proyectos para mejorar el sistema. Lo que yo veo –es una postura totalmente personal- es que en este mundo lo único sano que queda es el voluntariado: no hay maldad en el voluntario. El único objetivo que persigue es cuidar personas y bienes, y tratar de dar ejemplo de eso a nuestros hijos y a la comunidad.

GL: Si nos encontramos con bomberos voluntarios en cualquier parte del mundo, probablemente hablen los mismos códigos
– Efectivamente. Antes para comunicarnos tirábamos una botellita al mar con un mensaje. Hoy tiramos el mensaje en Internet y la comunicación es instantánea. Y efectivamente se da eso: me puedo comunicar con cualquier bombero y es como si fuera cordobés como yo, con las mismas penas, las mismas ambiciones. Es una sola familia basada en valores. Si alguien va por delante, va seguro de que el que va atrás va en la misma dirección.

GL: ¿qué sienten como más peligroso? ¿Las llamas que avanzan y destruyen bosques o los intereses de los hombres? ¿Se nota la actitud depredadora hacia el ambiente?

– En Cosquín –yo soy nativo de allí- ha cambiado mucho la vegetación, incluso es notorio que también el ambiente está muy cambiado y eso es preocupante.
– Creo que los intereses de los hombres son más peligrosos y eso se ve en que no se hacen buenas planificaciones urbanas, donde cada vez se destruyen más bosques naturales. Duele y es triste ver las talas donde se palpa la extinción de animales, pájaros, etc. Se está perdiendo todo eso y queremos protegerlo lo más posible

“Señor, pude haber sido guerrero, y no lo fui.
Pude haber escogido como profesión una de las tantas que abundan, y no lo permitiste.
Inclinaste mi espíritu y mis pasos hacia el camino donde tus hijos necesitan de mi.
Es allí donde requerías la fuerza de mis brazos y el aire de mis pulmones.
Del guerrero que pude haber sido, me convertiste en soldado de la paz.
Ahora, Señor, convertido en esclavo de tu mandato,
Mil gracias te doy por haberme hecho bombero.”

ORACION DEL BOMBERO
Tu que me conoces, Señor, y que conoces la sinceridad de este ideal que en mi alma palpita,
Tú sabes que en todos mis actos no me ha guiado otro interés que el cumplimiento de este código de admiración y de sacrificio que es mi honor y es mi orgullo. Que nunca has permitido que mi voluntad desmaye ante una vida que rescatar o un peligro que vencer. Tú que me has visto responder con prontitud al llamado del deber, y que has visto mi alma implorante a tus pies cuando parecía vacilar ante una humana flaqueza. Permite Tú, Señor, que tu amor, que da poder a mi brazo y fortaleza a mi espíritu nunca me falte. Dispon tú y tu divina luz y guía mis pasos cuando el peligro me aseche o mis fuerzas se agoten. Ordena tú que cuando ya esté cumplida la misión de paz y de servicio que por tu voluntad me he impuesto y que justifica mi vida, los míos no queden desamparados. Haz tú que el ejemplo y el recuerdo de aquellos que cayeron en el cumplimiento del deber nunca se extinga. Pero por sobre todo ello, Señor, te pido que este ideal que me anima, sea simiente generosa que encuentre campo propicio en el corazón de las futuras generaciones para la gloria de nuestra patria y honra de nuestra institución. Amén.

–    Con personas como éstas, la humanidad tiene esperanzas.
GL: Yo diría que las fuerzas de la oscuridad, son densas e intensas. Del otro lado tenemos estas damas y estos caballeros de la luz, que llevan adelante con tanta sencillez y simpleza lo que dice Jesús: “No hay amor más grande que dar la vida por los amigos”. El problema son los del medio, los tibios, los que no toman ninguna posición en el partido de la vida, los mediocres, los que van detrás del mejor postor y no terminan de definirse. Creo que la maldad es escasa. La bondad también. Lo que sobran son las medias tintas.
    Por eso creo que ante el testimonio de quienes nos infunden tanta esperanza como los Bomberos voluntarios, todos y cada uno debemos definirnos un poquito más hacia qué lado del partido de la vida vamos a jugar: para el arco de la vida o para el arco de la muerte.