“Los encuentros con Jesús” es un ciclo junto al padre Francisco Palacios, párroco de la Parroquia Nuestra Señora Madre de Dios y Madre de la Iglesia de Barrio Las Palmas, en Córdoba.
Cada semana profundizamos y reflexionamos en estos encuentros que mantuvo Jesús con diferentes personajes bíblicos y en esta oportunidad comenzamos con el encuentro con el ciego Bartimeo.
“Entonces vinieron a Jericó; y al salir de Jericó él y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando. Y oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! Y muchos le reprendían para que callase, pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí! Entonces Jesús, deteniéndose, mandó llamarle; y llamaron al ciego, diciéndole: Ten confianza; levántate, te llama. El entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús. Respondiendo Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que te haga? Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista. Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha salvado. Y en seguida recobró la vista, y seguía a Jesús en el camino.” (Marcos 10:46-52)
“Bartimeo estaba fuera de la ciudad y al borde del camino. En este contexto histórico y cultural se da este encuentro con Jesús y el ciego Bartimeo, que era un hombre que no podía andar un camino, sentado sobre su manto, que era todo su capital”.
“Bartimeo comienza a gritar a Jesús. Nos invita a llamar a Jesús, a rezar con pasión y así tener mas compasión. Es la cultura de hoy, donde encontramos esta complejidad. Jesús escucha el grito de Bartimeo, se detuvo y lo hace llamar, comenzando a quitar la ceguera de la comunidad.”
p. Francisco Palacios
Te invitamos a escuchar el programa completo en el audio que acompaña esta nota