Espiritualidad familiar: ¿cómo descubrir a Dios en casa?

miércoles, 6 de junio de 2018
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06/06/2018 – El padre Javier recordó la importancia de la Amoris Laetitia, y la enseñanza concreta con la que va aterrizando sobre realidades muy particulares de la configuración del rostro de las familias en los tiempos que corren. En torno al tema de la espiritualidad familiar, comenzó diciendo que, que “En la convivencia de todos los días encontramos al Señor. Aún en escenarios que posiblemente te resulten difíciles para sostener la mirada en el Dios viviente que allí está escondido”, dijo el Padre Javier Soteras, Director de Radio María Argentina.

Espiritualidad familiar y matrimonial

“La espiritualidad de los laicos debe asumir características peculiares por razón del estado de matrimonio y de familia y que las preocupaciones familiares no deben ser algo ajeno a su estilo de vida espiritual”. (Amoris Laetitia 313)

El padre Javier aclaró que “El Papa Francisco invita al laicado a no dejarse ganar el corazón por lo que en un tiempo -en la espiritualidad más de estilo monacal en la iglesia, que invadió todo estado de vida-, se hablaba de esta expresión, <para ser santos, fuga mundi>, escaparse del mundo. Es decir, la fuga mundi, es la que acá el Papa neutraliza con su enseñanza, no se trata de escapar de la convivencia en el mundo en el que vivimos, el laico está para ser sal y luz en el mundo”, señaló.

“Estar en el mundo sin ser del mundo”

Este el gran desafío de la vida laical, santificar el tiempo, santificar la actividad. Y por lo tanto, el Papa hace foco en ese lugar, para evitar que espiritualidades laicales y matrimoniales, tengan características de vida religiosa en clave monacal. La fuga mundi, está bien planteada para quien está llamado a vivir monacalmente, consagrando toda su vida en el silencio, la oración y en el trabajo, pero también allí siempre en contacto con lo de todos los días”, acertó.

“No hay que ir a buscarlo lejos al Señor, Él está escondido en lo de todos los días”, expresó Javier. Y agregó que “Lo que santifica la vida es la vida en comunión con el misterio”, “lo que nos santifica es el Señor, por lo tanto la santidad brota de la presencia del Señor, que nos pone en contacto con el misterio trinitario”.

“Ustedes darán mucho fruto si permanecen en mí”

El Padre Javier dijo que hay que llevar adelante una espiritualidad en Dios, permaneciendo en Él. “No se trata solamente de existir, sino elegir permanecer en la existencia en el misterio, que es misterio pascual, eso santifica. Hay que vivir en Dios la convivencia familiar”.

“El lugar de mayor plenitud para la familia es la celebración eucarística, porque ahí reactualizamos la pascua de Jesús en nuestras pascuas”, indicó el Padre Javier Soteras.

Hacer de la oración nuestra batalla cotidiana

Finalmente, expresó que “El alma de la mística familiar es la oración, por más me esfuerce por vivir el Evangelio, lo cual no es menor, al final el encuentro personal con Jesús, es eso, un encuentro personal”. “Hay que estar en la oración, es la fuerza del cristiano y la debilidad de Dios”, afirmó.