17/09/2024 – Junto a Hermana Mónica Cordero seguimos compartiendo este espacio semanal de reflexiones que nos ayudan a descubrir la presencia de Dios en la vida cotidiana.
En esta oportunidad nos invitó a hacer memoria, a pasar por el corazón nuestros recuerdos y descubrir cómo en esos momentos especiales, alegres o tristes, se fue dando el paso de Dios por nuestra existencia.
“Cada uno seguramente hoy cuando cocinó o cuando trajo algo a casa, cosas de otros familiares que hemos ido recibiendo en herencia o que quizás nos trajimos con nosotros: algo de la abuela o la tía…una cucharita, un plato, cosas que te unen y te vinculan con la vida de otros que han pasado por la tuya. Diferentes situaciones y recuerdos ¿qué hacemos con ellos? Se me ocurre pensarlos para desde ahí cantarle a Dios ‘¡piedra libre!’ en mis recuerdos, en esas cosas que se han ido gestando en mi vida”, comenzó diciendo hermana Mónica.
“Recordar a una abuela, una tía, una mamá, una hermana…y ustedes dirán: ‘¿Y Dios qué tiene que ver en esto?’ Porque de repente al hacerlos presentes quizás allí hubo una ‘buena noticia’, un Evangelio (eso significa ‘buena noticia’).”
“Volver a hacer memoria, recordarlos, volverlos a pasar por el corazón puede ser también una gracia de Dios. La propuesta es redescubrirlo a Dios en eso que que estoy viviendo, partiendo del hecho de que Dios está presente en toda nuestra vida, en todos nuestros momentos”.