“Hay adicciones que dañan mi cuerpo, otras que dañan a mi familia y otras que dañan a toda una sociedad”

miércoles, 11 de julio de 2018
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05/07/18 – Todos los jueves hasta el mes de Setiembre el Dr. Alfredo Miroli, nos acompaña en el programa “Hoy puede ser” con el ciclo “Adicciones y sociedad”. En esta oportunidad el Dr. Miroli abordó el tema : “Adicción y toxicidad”.

En primera instancia el médico resaltó que no está de acuerdo con que muchas instituciones que abordan la temática de las adicciones utilicen la palabra “lucha”, ya que en este abordaje no se “lucha” sino se trabaja, se aclara, se informa y si es posible se educa. “Sí es bueno utilizar el término “lucha” contra el narcotráfico, porque eso requiere leyes, fortalezas, estructuras, armas, inteligencia, etc. Nosotros no queremos un papá que luche contra su hijo, ni un hijo que luche contra el papá. Que la prevención sea una acción basada en el convencimiento y el conocimiento y no la imposición de quién gana en una batalla porque luchó”, dijo.

Como ya el especialista ha abordado en programas anteriores, hay adicciones que no dañan, como el tomar mate o té, pero otras sí. “Si la adicción lastima, hiere y lesiona eso se llama patología y debemos trabajar en prevención”.

Nuestra sociedad está llena de patologías adictivas. “Nosotros trabajamos en ver cómo podemos prevenir y tratar a pacientes que sufren de algunas adicciones que lastiman.”

 

¿Qué puede lastimar una adicción?

El Dr. Miroli explicó que hay adicciones más fáciles de entender porque dañan el cuerpo de una persona. “Si yo digo alcohol, la gente imagina un hígado; si digo tabaco, imaginan pulmones; si digo estupefacientes, seguro imaginan un cerebro. A pesar que no es así, porque ninguna sustancia química daña órganos sueltos.”

“Cuando decimos adicciones químicas no pensemos en un sólo órgano, pensemos en la persona”, dijo.

El médico aclaró además que hay adicciones que no dañan órganos, pero sí a mis seres queridos. “Hay adicciones que no dañan mi cuerpo, pero sí dañan mi familia, y ésta es una patología muy severa. Por ejemplo tengo un paciente que tiene ludopatía. El cuerpo de esta persona está intacto , pero la familia ve que en una noche de juego se lidapida el esfuerzo de toda una vida y el futuro de los hijos.”

“Estas patologías también merecen tratamiento. No hay órganos dañados pero sí dañan toda una familia”, aclaró.

Y hay otras adicciones que no dañan ni a mi cuerpo ni a mi familia, pero dañan la sociedad severamente. “Una de ellas es a más común de todas: la adicción al celular. “El teléfono celular es un objeto que te adhiere, te pega y se transforma en tu dueño. Produce un síndrome de abstinencia infernal. Hoy en día la mayoría de los accidentes de tránsito con lesiones graves no es el alcohol, es el uso del celular mientras se maneja.”

En cada una de esta adicciones las personas que la padecen necesitan ayuda profesional y contención afectiva. “A las madres que tienen hijos con alguna de estas patologías les digo: que carguen a sus hijos sobre sus hombros para que sus hijos puedan ver más allá de esa muralla que son las adicciones, para que logren ver su futuro sin su adicción”, finalizó.

 

Te invitamos a escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.