Incidir, transformar y construir comunidad

lunes, 14 de julio de 2025

14/07/2025 – La incidencia política y social es, en esencia, una poderosa expresión de la hospitalidad en el espacio público. Es la capacidad de nuestras comunidades para acoger, incluir y transformar realidades, tejiendo lazos de pertenencia y dignidad para todos. Sin embargo, en la Argentina actual y en gran parte de la región, esta concepción de la hospitalidad enfrenta desafíos significativos, que se ven acentuados en la compleja realidad migrante.

Argentina, históricamente un país de brazos abiertos a la inmigración, atraviesa hoy un momento de redefinición en sus políticas y discursos migratorios. Si bien continúan llegando personas de diversas latitudes, especialmente de países vecinos y en los últimos años, de Venezuela, Colombia, Cuba, Senegal o Haití, se observa una creciente restricción en el acceso a servicios públicos esenciales como la salud y la educación, así como mayores requisitos para la residencia permanente y la ciudadanía. Esta situación genera vulnerabilidad y dificulta la plena integración de quienes buscan construir una nueva vida en el país.

Nos encontramos ante un preocupante aumento de políticas de hostilidad y narrativas basadas en el odio, que buscan fragmentar el tejido social y erosionar los cimientos de la convivencia pacífica. Estas narrativas a menudo estigmatizan a las personas migrantes, culpabilizándolas de problemáticas sociales y económicas, y fomentando la discriminación. Frente a este panorama desolador, es crucial reafirmar una convicción fundamental: “este trabajo no puede hacerse en solitario, y no nos interesa hacerlo de esa manera.”

La verdadera transformación social surge de la acción colectiva y el compromiso compartido. Es en el trabajo territorial, en la cercanía con las comunidades y en la articulación local donde encontramos las herramientas más eficaces para la acogida, la integración y la transformación, particularmente para la población migrante.

Construir una sociedad más justa y hospitalaria, que respete los derechos de todas las personas, incluyendo a quienes migran, requiere de la participación activa de todos. Es un llamado a la acción, a la empatía y a la construcción de puentes en un contexto que a menudo nos invita a levantar muros. El desafío es grande, pero la capacidad de respuesta de nuestras comunidades, forjada en la solidaridad y el compromiso, es aún mayor.

Así lo entienden los miembros del Servicio Jesuita a Migrantes en Argentina y Uruguay que nos acompañan cada lunes en el micro “Cristo en el rostro de los migrantes”.

En esta ocasión, Manuel Ruiz Durán, coordinador para Suramérica de la Red Jesuita con Migrantes continental, y responsable de Incidencia del Servicio Jesuita a Migrantes en Argentina y Uruguay sostuvo que «la incidencia es todas las actividades que realiza la organización, dirigidas a participar del debate público, de la esfera pública con respecto a las temáticas sobre migración y refugio en particular en lo que tiene que ver con la promoción de la realidad migrante»

Ruíz Duran tambien destcó que, «desde el Servicio Jesuita a Migrantes se cree en la hospitalidad como ese abrirse a a la presencia, a la llegada del otro y acoger desde un sentimiento profundamente cristiano».

Se puede acceder a la entrevista completa en el reproductor de videos ubicado bajo el título.