Laudato Si: Hemos perdido el vínculo con la naturaleza, explica Pablo Canziani

miércoles, 2 de agosto de 2017
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02/08/17 – En diálogo con Radio María, el Dr. Pablo Canziani, director del equipo interdisciplinario para los estudios de procesos atmosféricos en el cambio global de la UCA e investigador del CONICET, en el marco del ciclo de cuidado de la casa común presenta el tema de la responsabilidad laical cotidiana en la dimensión social ambiental económica, que surge del trabajo de Francisco con la enciclica Laudato Si.

En distintos encuentros ecumenicos encontré mas interés que entre grupos católicos, es hora que tomemos conciencia de este documento.”

¿Qué no es la encíclica?

  • No es un documento político anti económico. El tema social y ambiental no es un tema político, requiere soluciones políticas pero primero se debe definir la linea de base: ¿dónde estamos? ¿qué estamos haciendo mal? y ¿qué podemos corregir?

 

  • La encíclica no es antiempresarial. El empresario dentro de la vida de la Iglesia tiene un lugar fundamental.

 

  • No es un documento científico con errores. Toma a la ciencia, pero lo que hace es una síntesis de la información para que la entienda el común de la gente.

 

¿Qué es?

  • Un documento extenso donde el Papa trata de plantear la visión desde la Iglesia de una situación que puede ser teológica, o que tenga que ver con la sociedad. En este caso Laudato Si, trata la parte social, por incluir el aspecto ambiental.

 

  • Usa un lenguaje mas llano que está dirigido al pueblo de Dios, creyentes cristianos, incluso para no cristianos y ateos.

 

  • El laico es el principal responsable de llevarla a cabo, debemos salir al mundo a cambiarlo.

 

  • Es una encíclica integradora e integral. Integradora porque genera un vínculo muy intimo entre los avances de la ciencia y el desarrollo del dialogo de la fe. Integral porque es un documento basado en ciencias ambientales que apunta a demostrar la convergencia entre lo que esta logrando la ciencia a través del conocimiento de la sociedad y la tierra, y su semejanza con lo que venimos planteando como Iglesia acerca de nuestra relación con la naturaleza, sobre todo los franciscanos.

En ella encontramos:

Muchas cosas que hoy dice la ciencia que hay que hacer ya estaban incorporados en el antiguo testamento:
1º parte: nos presenta la realidad de la ciencia.
2º parte: nos presenta esta estructura que emerge desde la Biblia.

En partes trata de erradicar esto de que la materia es mala y lo espiritual es bueno, es todo bueno porque todo lo hizo Dios. Lo espiritual se funde en la consagración con lo material, porque Dios vio que era bueno, como dice el Papa en la encíclica. Debemos dejar de pensar en términos dualistas.

Cuando uno logra contemplar la belleza de la creación, la belleza de las obras de arte que genera el hombre a través del don creativo de Dios, uno está nutriéndose en lo espiritual.

La tecnología puede ser buena si la sabemos usar, porque la misma tecnología que se usa para salvar vidas puede servir para matar.

De esta manera Pablo culminaba con ejemplos sobre los avances tecnológicos dejando abierta la lectura de la encíclica para los siguientes encuentros.