02/03/2023 – Con la Hermana Mónica Cordero, religiosa de la Diócesis de Río Gallegos transitamos el ciclo sobre “Emociones y Pastoral”. En esta entrega, repasamos las distintas emociones que presentamos en los programas anteriores: como miedo, sorpresa, enojo.
Hoy la propuesta es profundizar sobre la alegría en clave de Jesús y en clave de pastoral.
Estamos en Cuaresma, que es el camino a la Pascua, al Domingo de Resurrección. Por eso lo anticipamos el sábado a la noche. Hacemos el camino de la cuaresma con la certeza y la alegría de la victoria del Señor. Y no caminamos con un Señor crucificado, caminamos con Jesús resucitado,y esto es para más vida.
Y explica la hna. Mónica: “porque una cosa es que me acompañe en este tiempo de alguien doliente, sufriente, y otra cosa es que me acompañe de alguien que ha vencido y que esta vivo.
La Constitución Pastoral Gaudium et Spes de 1965, expresa en el número 22 que Dios amó con corazón de hombre, con toda su emocionalidad.
“A veces creemos que lo emocional, la alegría, es poco seria para ponera en el Señor. Y no es así, también Él quiso ofrecer la Buena Noticia desde un corazón alegre.
Es importante mirar a Jesús desde sus alegrías, donde las expresa más y están plasmadas en los evangelios, para reencender la alegría propia. Porque la alegría, contraria al miedo nos activa, nos empuja, nos pone de pie.
El Papa Francisco ha dicho que “Hay que tener el corazón siempre alegre porque el Señor ha vencido”. Y nos ofreció una exhortación apostólica clave de su ministerio en estos diez años de pontificado, “La alegría del Evangelio”.
El Santo Padre sostiene que “la alegría del evangelio llena, colma el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Él es la fuente de la alegría para los cristianos, y son liberados de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento”.
Hermana Mónica reafirma en la reflexión de hoy que “Todo camino en nuestra vida… el cuaresmal, el sinodal como Iglesia, es en compañía y presencia de Jesús resucitado a nuestro lado. Si le dejamos su Alegría pascual llena cada uno nuestros pasos cotidianos personales y comunitarios”.