Recuerdo cuando era niño el verano familiarla vida era un partido muy fácil de ganarlos años trajeron las guerras que nos iban a salvarlas promesas el futuro la derrota trajo la paz.Donde esta mi alazán mi espada de maderayo era el capitán, ganaba las batallas sin luchary desfilaba frente a mi mama, ella me hacia la venia, yo llevaba la bandera.Ya se acabo el comunismo, se acabo la era nuclearse acabaron las ideas, se acabo la caridadlos años trajeron impuestos para la prosperidadsoy mayor para el trabajo, pero no para pagarDonde esta la dignidad, la risa de mis hijosyo era el capitán ganaba las batallas sin matary merendábamos con mi mama. Ella me hacia la veniayo llevaba la bandera. Como les digo que no juego mas.
Pero lamentablemente nos oyeron los que saben y quisieron nuestro juego encasillar. Repartieron instrumentos, nos pusieron un maestro y nos enseñaron a jugar…
A jugar a Antón Pirulero y que cada cual atienda su juego y el que no una prenda tendrá.
Y aquel inocente juego sigue aquí grabado a fuego.
Y aquella banda quedó partida en bandos opuestos. Unos vamos a Berlín-Berlín para cumplir nuestras prendas y los otros perfeccionan el "sálvese quien pueda".
Basta ya de Antón Pirulero. Quiero atender tú juego y mi juego busco un juego común al mundo entero.