“La interdependencia nos obliga a pensar en un proyecto común”, Papa Francisco en Laudato Si’

lunes, 25 de mayo de 2020
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25/05/2020 Iniciamos el el capítulo Quinto de la Encíclica Laudato Si’: “Algunas líneas de orientación y acción”. Enfocamos la conversación en algunos puntos de este Documento del Papa Francisco sobre el Cuidado de la Casa Común.

A partir de la reflexión del Papa sobre el “Diálogo sobre el medio ambiente en la política internacional”, profundizamos, junto al padre Javier Soteras,  en torno al punto 164:

“Un mundo interdependiente no significa únicamente entender que las consecuencias perjudiciales de los estilos de vida, producción y consumo afectan a todos, sino principalmente procurar que las soluciones se propongan desde una perspectiva global y no sólo en defensa de los intereses de algunos países. La interdependencia nos obliga a pensar en un solo mundo, en un proyecto común”. (LS 164)

Al respecto el Director de Raddio María dijo que “la situación de pandemia que nos rodea, ha desestabilizado la convivencia global y para atender a su demanda y a su acción, se desnudan las flaquezas de los sistemas globales. Esto nos invita a nuevos modos de acuerdo”. A su vez, el padre Javier agregó que, todavía permanece la fuerza de poder de quienes más tienen frente a los que menos tienen. “Esto nos remite a la forma evangélica de actuar con la sociedad global y dejar que el Evangelio sea el que penetra en su modo de ser y de proponer la cultura que pueda modificar las estructuras de la convivencia en lo social, económico y político”, agregó.

Esta presencia del Evangelio, puede ser de un gran valor instrumental: “Debemos ponemos de pie como sociedad cristiana y aprender a estar en el mundo sin ser del mundo, haciendo cercano el diálogo tan plural y diverso en la sociedad en la búsqueda de este bien común que, para nosotros es, un plan que está pensando por Dios, en relación a la convivencia de la sociedad global en términos equitativos, justos y pacíficos”, añadió Soteras.

El próximo punto de la Carta Encíclica conversado fue:

“Mientras no haya un amplio desarrollo de energías renovables, es legítimo optar por la alternativa menos perjudicial o acudir a soluciones transitorias. Sin embargo, en la comunidad internacional no se logran acuerdos suficientes sobre la responsabilidad de quienes deben soportar los costos de la transición energética“. (LS 165)

Sobre este apartado, el padre Javier dijo que se espera que sean aquellos que tienen más poder económico y que son los que más afectan al medio ambiente que se hagan cargo de ese tipo de transición. “Son los que más producen, son los que tienen el sistema de producción que hay que modificar para que avancen sobre los nuevos modos alternativos de energía”, dijo, además.

“La política y la empresa reaccionan con lentitud, lejos de estar a la altura de los desafíos mundiales. En este sentido se puede decir que, mientras la humanidad del período post-industrial quizás sea recordada como una de las más irresponsables de la historia, es de esperar que la humanidad de comienzos del siglo XXI pueda ser recordada por haber asumido con generosidad sus graves responsabilidades”. (LS 165)

Este punto nos refleja la complejidad de la resolución del problema, en lo lento por la falta de capacidad para comprender el grado de dificultad y gravedad que ofrece el actual escenario y no asumir la responsabilidad que nos cabe en orden a ser un eslabón dentro del engranaje de todo lo que hace al proyecto de la humanidad.

“El papa Francisco está invitando a hacernos responsables de resolver la herencia recibida y que se nos reconozcan en los siglos que vienen como aquellos que fuimos capaces de tomar el guante de la dificultad que asumimos”, finalizó el padre Javier.

Te invitamos a escuchar el programa completo y a compartirlo en tus redes sociales.