29/05/23- Como cada lunes, el Padre Mateo Bautista, sacerdote camilo, nos acompaña cada lunes con el ciclo “Personajes Bíblicos”. En esta oportunidad dialogamos sobre la figura del padre, dentro de la parábola del hijo pródigo.
El padre conoce muy bien a sus dos hijos, sabe de sus valores y miserias, y nunca los compara; los dos son sus predilectos, a pesar de sus actos y actitudes.
Es un hombre amoroso, paciente, sereno, escuchante, dialogante, generoso, desapegado de los bienes materiales, con afable trato con todos, buen patrón, alegre, optimista, para nada rencoroso, rehabilitador de las personas y amante de la libertad, sumamente expresivo en sus gestos afectivos; un padre que, ante todo, quiere que sus hijos saboreen su paternidad y vivan plenamente su filiación y fraternidad.
No es débil, sí justo e indulgente con las flaquezas ajenas, dispuesto al perdón, y hasta suplicar, para llegar a la total reconciliación. Tiene la gran autoridad de su compasión. Como vemos, su amor es incondicional; su perdón, eterno; su benevolencia, infinita.
Inmensa es la ternura con la que el padre se dirige a su primogénito y heredero. Antes había llamado al menor: «Hijo mío». Ahora, responde afectuosamente: «Teknon (mi querido hijo), tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo» «Teknon» es la misma palabra que usa la Virgen María, cuando encuentra a Jesús, de doce años, en el templo (Lc 2,48).
La llave de la entrada a la casa del padre se llama “filiación”, pasando por la puerta llamada “hermano”.
No te pierdas de escuchar la entrevista completa en la barra de audio debajo del título.
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