La solidaridad que se hace rostro: un viaje al «Hogar Buen Samaritano»

martes, 26 de agosto de 2025

26/08/2025 – «Una casa está más relacionada con el edificio en sí mismo y el hogar con lo que nos representa… es ese lugar al que uno quiere volver, al que uno quiere llegar para depositar ahí sus alegrías, sus tristezas, sus emociones y todo lo que le pasa». ¿Pensaste alguna vez que la solidaridad es mucho más que dar algo material? ¿Te imaginaste que, al abrir la puerta de tu corazón, podés transformar un edificio en un verdadero hogar? En esta conmovedora entrega del programa especial «La solidaridad empieza en Casa», viajamos al Hogar Buen Samaritano en Córdoba, donde Cecilia Oliva, junto al Padre Javier Soteras, nos abren las puertas de un lugar que se convierte en milagro cada día.

En un encuentro lleno de vida, el Padre Javier nos invita a reflexionar sobre la vocación de servicio que nace del corazón de la Obra de María, inspirada en la visita de la Virgen a su prima Isabel. Es la misma vocación que se vive en este hogar, donde la solidaridad se vive como un gesto de caridad que va más allá de lo económico. A través de la empatía, el voluntariado de esta obra logra ponerse «en el cuero del otro» para acompañar el dolor y encontrar, junto a ellos, un camino hacia una vida mejor. Este lugar se hace hogar porque quienes lo habitan, lo sienten y lo viven como su familia, sin importar si llegaron con «códigos rotos» o desde la calle. Como dice Luis, uno de los residentes, «acá yo formé mi familia propia, porque acá somos una familia y es tan lindo compartir con ellos».

El director del hogar, Joaquín Hernández, nos muestra que el lugar se convierte en hogar gracias a la presencia de cada uno de sus 25 residentes, quienes con sus emociones, alegrías y tristezas, le dan sentido al espacio. Es un espacio de contención y cariño que se construye día a día. Belinda, otra de las residentes, nos confiesa que lo que más disfruta es simplemente levantarse y tener «compañeros todos los días», un lujo que muchos damos por sentado. Y Fernando, un pionero del lugar, nos cuenta que el trabajo en el hogar le da un sentido a su vida, y que ver los muros pintados es el fruto de esa tarea que transforma la casa en hogar.

Lo más conmovedor es que vos también sos parte de este milagro. Cada donación, cada oración, cada persona que decide compartir este mensaje, contribuye a que esta casa siga siendo un lugar de encuentro, de presencia compasiva y de amor. El Hogar Buen Samaritano es un testimonio vivo de que la vida habla, y que la solidaridad, cuando es honesta y genuina, se hace rostro y se hace presencia, y se transforma en un verdadero hogar donde nadie se siente solo. Te invitamos a ver el video completo para inspirarte aún más con estas historias de vida.