03/01/2017 – En el misterio de Dios, hacia adentro, todos los problemas que puedan surgir de la diferencia, se hacen uno. El misterio de la trinidad en el Credo es el tema del que estaremos compartiendo en ésta catequesis.
Desde el misterio de Dios somos conocidos y esto es lo que hacemos cuando en su nombre establecemos vínculo de profunda comunión que nace de este conocimiento íntimo que Dios tiene de, nosotros que nos permite conocernos mejor. Es ahí cuando tomamos la decisión de vivir en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y en Su nombre establecemos vinculo de amor y de alianza.
Los cristianos somos bautizados en el nombre del padre, del hijo y del Espíritu santo y en el bautismo es en donde se establece este vinculo de alianza, es allí en donde decimos creer, decir creer es decir que nuestra vida toda esta vinculada a este misterio, no es en los nombres sino en el nombre porque es un Dios en 3 personas.
Ese es el misterio central de nuestra fe y de la vida cristina, es al fuente de todos los misterios en la fe, es la enseñanza fundante, esencial de todas las verdades expresadas. Toda la historia es la historia del camino por los cuáles el Dios verdadero se nos da a conocer, nos aparta del pecado y nos reconcilia.
Detenernos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo es meternos profundamente en el acto creyente, en donde nuestra vida tiene toda su raíz más onda y profunda: creemos en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Conocemos la identidad más profunda de Dios que se revela en su quehacer, mientras más nos detenemos a contemplar el misterio de Dios, uno y trino, más nos abrimos al obrar de Dios en lo cotidiano y en lo concreto.
Te invitamos a escuchar la catequesis completa.
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