María al pie de la Cruz

lunes, 11 de abril de 2022
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11/04/2022- Dando inicio a esta Semana Santa, en ‘Madre del pueblo’, nos acompañó el padre Marcelo Amaya.

Al inicio de su espacio nos compartió novedades acerca de la peregrinación del pueblo de Dios en Catamarca y luego nos acercó a la devoción de María, en soledad al pie de la Cruz, una imagen de la Virgen que no deja indiferente a quien la contempla.

María aparece caracterizada como una mujer sencilla, fuerte y de fe. Está vestida con una túnica hebrea, de pie, apoyada en la cruz y alargando sus brazos hacia adelante, como queriendo abrazar de nuevo el cadáver de Jesús que ha sido arrancado de sus brazos momentos antes.

La Soledad está desfallecida de dolor, así nos lo muestra su postura, su rostro y la única lágrima que cae por su rostro. Pero su pie avanzado hacia delante nos enseña que, pese a lo duro del momento, va a seguir caminando tras su hijo hasta la sepultura porque le ama como madre y porque cree como mujer de fe que éste no puede ser el final de la historia.

Su imagen dolorida, pero también fuerte, conecta con aquellos momentos en los que la vida nos da golpes, más o menos fuertes, que hacen que todo en nuestro interior se tambalee y necesitemos buscar un punto de apoyo. Para María, este apoyo fue la Cruz donde había estado clavado su hijo, pero sobre todo fue su fe en el Dios del amor. Por eso, nosotros hoy podemos apoyarnos en su amor de Madre.

María nos recuerda con su fe inquebrantable en su Hijo, que nada podrá separarnos del amor de Dios, porque al final, el amor, es capaz de vencer incluso a la muerte.

Viernes de dolores, así se le dice según la tradición, al viernes en que se conmemora los dolores de la Virgen Santísima, como Madre dolorosa al pie de la Cruz. Esta veneración data del siglo XIII.

Y terminamos acompañando a esta Madre Dolorosa con algo muy hermoso escrito por el Cardenal Pironio:

Señora de la Pascua,

Señora de la Cruz y de la Esperanza.

Señora del Viernes y del Domingo.

Señora de la noche y de la mañana.

Señora de todas las partidas, porque eres la Señora del “tránsito” o de la Pascua. Escúchanos: Hoy queremos decirte “muchas gracias”.

Muchas gracias, Señora por tu Fiat, por tu completa disponibilidad de “esclava”.

Por tu pobreza y tu silencio.

Por tu gozo de las siete espadas.

Por el dolor de todas tus partidas, que fueron dando la paz a tantas almas.

Por haberte quedado con nosotros a pesar del tiempo y la distancia.

Además, como cada sábado, nos acompañaron los hermanos del Movimiento Familiar Cristiano y el padre Marcelo nos ayudó a seguir profundizando en el camino de la Sinodalidad, en esta oportunidad, se centró en el tema de la escucha de las Escrituras.

Te invitamos a escuchar el programa completo en el audio que acompaña esta nota

padre Marcelo Amaya