“Me preocupa la disgregación y la violencia familiar junto al crecimiento de las adicciones”, aseguró monseñor Vicente Bokalic.

jueves, 1 de agosto de 2019
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01/08/2019 – Monseñor Vicente Bokalic, obispo de Santiago del Estero, afirmó que “en nuestra provincia vemos que hay una pobreza estructural cuyos síntomas son la disgregación y la violencia familiar junto al crecimiento de las adicciones. El tema de la droga en los jóvenes afecta a Santiago como lo hace con todas las provincias del Noroeste argentino. Como Iglesia acompañamos desde la prevención y sobre todo con los Hogares de Cristo. En definitiva, todo esto surge de la postergación de nuestra gente, de su falta de expectativas y del gran sentimiento de orfandad que notamos en este tiempo. Sabemos que todavía hay mucho por hacer para acompañar estas realidades”.

El pastor santiagueño reconoció además que “es intenso el trabajo que venimos realizando con los hermanos evangélicos y con los integrantes de las ongs barriales. La idea es prevenir y, si ya no es posible, acompañar en conjunto a quienes han caído en el mundo de las drogas”. Monseñor Bokalic destacó asimismo que “coordinamos todo con el gobierno provincial y con las autoridades del Sedronar nacional”.

En relación a la reciente visita Ad Límina, dijo que “fue un momento de encuentro y de comunión eclesial muy lindo. Es la oportunidad que tenemos los obispos de afianzar la comunión de fe y de afecto con el Santo Padre. Las celebraciones en las cuatros basílicas romanas fueron momentos muy intensos de oración, donde tuvimo presente cada uno de los rostros de nuestras diócesis”.

Hijo de refugiados eslovenos que hace muchos años llegaron al partido bonaerense de Lanús, monseñor Bokalic nació en la ciudad de Buenos Aires, el 11 de junio de 1952. Fue ordenado sacerdote en la congregación vicentina el 1º de abril de 1978 en el Santuario Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, por monseñor Alfredo Espósito Castro, obispo de Zárate-Campana. Además fue superior provincial de los Padres vicentinos en la Argentina. Más tarde sería elegido obispo auxiliar de Buenos Aires, el 15 de marzo de 2010 y ordenado el 29 de mayo de ese año en la parroquia Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa por el entonces cardenal Jorge Bergoglio. Finalmente fue trasladado como obispo de Santiago del Estero el 23 de diciembre de 2013 por el papa Francisco, tomó posesión e inició su ministerio pastoral como noveno obispo de de esa diócesis el 9 de marzo de 2014. En la Conferencia Episcopal es miembro de la Comisión de Misiones.