12/05/2022 – En “De lo espiritual en el arte”, Santiago Chotsourián, músico y religioso eremita , presentó un segmento de música religiosa argentina y latinoamericana. “Roberto Caamaño es un pianista, director y compositor argentino. Durante cuatro años fue el director artístico del Teatro Colón de Buenos Aires. Su obra comprende música de cámara, piezas sinfónicas y composiciones de música vocal religiosa”, indicó. “Domenico o también conocido como Domingo Zípoli fue un compositor ítalo-español del barroco, famoso por viajado hacia América durante el período colonial, contribuyendo a las misiones jesuíticas en el continente en el siglo 18. Falleció en Córdoba, en 1726. Finalmente no fue parte de la orden de los jesuitas pero si se destacó como organista y compositor de música instrumental para tecla”, dijo Chotsourián.
“Juan de Araujo fue un músico y compositor del barroco americano, período también conocido como música virreinal. Alrededor del año 1670 fue nombrado maestro de capilla en la Catedral de Lima. Posteriormente viajó a Panamá. De vuelta en Perú, fue contratado como maestro de capilla de la Catedral de Cuzco, y en 1680 de la Catedral de Sucre, donde permaneció hasta su muerte. Y Antonio Durán de la Mota fue un sacerdote y compositor musical de Sudamérica, aunque se desconoce su lugar de nacimiento. A principios del siglo 18 fue designado maestro de capilla de la iglesia matriz de la Villa Imperial de Potosí en Charcas, la actual Bolivia. Se desempeñó en el cargo hasta su muerte, en 1736”, agregó.
“El “Hanacpachap cussicuinin” (“Alegría del Cielo”, en español) es un himno procesional para las festividades dedicadas a la Virgen María compuesto en letra y música antes de 1622 por el sacerdote Juan Pérez Bocanegra y publicado en Lima en 1631. Se trata de la primera obra polifónica compuesta y publicada la América hispano hablante. Su letra está escrita en quechua, idioma en que el autor español conocía muy bien. Y finalmente, escuchamos a Heitor Villa Lobos, que fue un director de orquesta y compositor brasileño.Su música estuvo influida tanto por la música folclórica brasileña como por la música clásica europea. Compuso música coral para gran cantidad de coros escolares de niños, a menudo sobre adaptaciones de material folclórico. Su herencia en el Brasil de hoy es planteada con la escuela de samba como una fuerte sensación de orgullo y amor entrelazadas con sentimientos similares para su país”, cerró Santiago.